~CHRISTIAN~
Dejé todo y corrí hacia el auto como si mi vida dependiera de ello. El tráfico de final de tarde parecía conspirar contra mí, cada semáforo rojo una eternidad, cada auto lento un obstáculo entre Zoey y yo. Mi corazón latía tan fuerte que sentía las pulsaciones en el cuello, en la sien, en las muñecas que apretaban el volante.
Cuando llegué al hospital, Dr. Portella ya me esperaba en la recepción, su expresión cautelosamente optimista.
"¿Cómo está?", pregunté antes incluso de saludarlo, aún jadeante de la carrera.
"Venga conmigo", dijo, conduciéndome por los pasillos hacia la UCI. "Zoey comenzó a presentar cambios significativos en la actividad cerebral en las últimas horas. Los exámenes muestran ondas más activas, patrones que indican que el cerebro se está preparando para despertar".
Me detuve por un segundo, procesando la información.
"¿Va a despertar?"
"Vamos a comenzar a reducir gradualmente la sedación", Dr. Portella explicó mientras caminábamos. "Es un proceso que pu