Aurora Espósito, es una actriz novata que reside en Barcelona - España, pero luego de vivir un terrible episodio dentro de su tormentosa relación y ser testigo de un abuso, decide huir a Chile junto a la víctima; lugar donde vive su único hermano y familia. Una vez instaladas allá, comienzan a adaptarse y conocer personas, en ese momento Aurora decide cambiar el chip y vivir la vida a concho y sin inhibiciones. Tras disfrutar del sexo sin amor, se da cuenta que ningún hombre la hace sentir plena y esto comienza a aburrirle, pero todo cambia cuando un guapo diseñador de ojos azules le sonríe en una cafetería. Ambos quedan encantados con el otro, y aunque al principio sus fantasmas les impiden estar juntos, el destino se encarga de que se encuentren en todas partes, a tal punto que Aurora termina trabajando para Ulises Vega, el guapo diseñador de ojos azules. Luego de resistirse un poco más, los dos terminan cayendo en la tentación y se enfrascan en una bonita y excitante relación, donde los juegos con fustas y los orgasmos los vuelven insaciables. Tras estar en la cúspide de la felicidad y el placer, el pasado de Aurora vuelve para atormentarlos, involucrando a más de uno en el camino. Y tú ¿Qué esperas para leerlo?
Ler maisPrólogo
Dicen que las cosas siempre pasan por algún motivo en particular y que el destino ya está escrito desde el día en que naciste. Cuando mis padres se fueron de vacaciones a Italia, mi hermano y yo por distintos motivos no pudimos acompañarlos. Por eso, en el momento que salió en televisión el avión que había caído al mar y que nadie había sobrevivido, junto a la llamada que nos avisó sobre la defunción de nuestros progenitores, con Fermín comprendimos a la perfección aquellas palabras. Nuestro momento aún no debía llegar. Sufrimos mucho, pero él decidió huir del dolor que nos provocaba seguir viviendo en nuestra casa en Barcelona y se fue a Chile, en donde consiguió un buen trabajo, gracias a la carta de recomendación que le hicieron en el psiquiátrico donde trabajaba. Semanas antes de esto, vendimos la casa y me fui a vivir a un pequeño apartamento, y cuando él se fue, quedé sola y devastada. Mi corazón se había hecho trizas, pero necesitaba salir adelante. Los recuerdos de mis padres me quemaban por dentro y a veces no me dejaban respirar, sentía que iba a morir en cualquier minuto.
Existió una vez en que una joven y bella irlandesa viajó a España con sus amigas, recorrieron muchos lugares y quedó maravillada con cada lugar que conocía, hasta que en un minuto se separó de sus acompañantes y no sabía a dónde ir, apenas hablaba español y ya se estaba escondiendo el sol. Un bello español que estaba fuera de una lujosa tienda de zapatos, se acercó al verla mirando a todas partes. Conversaron y se enamoraron, por supuesto la joven volvió a Irlanda, pero aquel joven español le siguió el rastro y dio con ella. La chica quedó asombrada ante ello y decidieron vivir su amor. Por aquel entonces, la chica vivía con sus abuelos y era de buena familia, como el chico también era de buena familia, nadie se interpuso en que se casaran y se fueran a vivir a Barcelona. La chica aprendió mejor el español y poco a poco fue adaptándose al nuevo lugar en el que vivía. Al año después dio a luz a un varón de cabellos rubios y ojos verdes como los de ella, años más tarde también nació una niña de cabello rojizo y muchas pecas en su rostro, todos decían que parecía una muñeca de porcelana y era el retrato exacto de su madre. Pasó el tiempo y su amor jamás se desgastó. Leandro y Daphne fueron unos padres increíbles, siempre nos apoyaron en todo, eran cariñosos y rara vez nos juzgaban por alguna cosa.
Chloe, mi amiga de infancia, y una chica llamada Emily, que conocí cuando me trasladé al departamento, me ayudaron a no rendirme. En ningún momento me dejaron sola y si quería llorar, me dejaban derramar lágrimas sin reclamo alguno. Me recomendaron un buen psicólogo y no dejaron que mi pasado arrasara conmigo nuevamente.
Un año después entré a trabajar a un pequeño teatro, actuar era algo que me convertía en otra persona y en donde me relajaba un montón. Por eso había decidido estudiar Artes Escénicas. Sólo hacía trabajos de extras, pues sentía que me faltaba mucha experiencia y los demás también lo pensaban. Pasó el tiempo y llegó un nuevo compañero al elenco, era joven, delgado pero con algo de músculos, su pelo era rubio y tenía unos hermosos ojos almendrados que me dejaron embobada. Como era de esperar, muchas chicas se derretían a sus pies, pero yo no, me gustaba sí, pero tampoco era para tanto, y claro eso dañaba su ego. Semanas después se comenzó a acercar más a mí. Me regalaba flores y también me invitaba al cine. Al principio me hice la difícil, pero luego acepté salir con él. Nuestra relación marchaba bien, me encantaba pasar tiempo con él. Era todo un caballero, aunque siempre se quejaba por mis pecas, yo no le tomaba importancia. Nadie era perfecto y no quería que algún reclamo de mi parte nos hiciera tener problemas. Lucas se convirtió en mi mundo en poco tiempo. Algunos en el teatro me advertían y decían que tuviera cuidado, pues algunas veces era muy explosivo y se enojaba fácilmente. Claro, es que ellos no lo conocían tan bien como yo. No sabían que él era muy adorable y que su carácter fuerte no era problema para mí. Me sentía en una nube. Era feliz y todos se daban cuenta de ello. Lucas me llevaba a todas partes, pero siempre me limitaba al comer. Desde que le había contado que sufrí de bulimia cuando pequeña porque era gorda y los niños se burlaban de mí. Creo que lo hacía para cuidarme, así que tampoco le reclamaba. Mis amigas decían que no era bueno para mí, pero como siempre yo creía todo lo contrario.
El tiempo pasó, mi hermano estaba contento por todos mis logros conseguidos en la universidad, y venía a visitarme de vez en cuando. El día en que le presenté a Lucas; Fermín fue tosco, pero no me reprendió. Dijo que solo quería verme feliz, pues me lo merecía, pero que tuviera cuidado ¿Por qué todos se empeñaban en decir aquello? Lucas era un buen novio y me cuidaba mucho. Claro, era celoso y algo posesivo porque donde quiera que fuera, los chicos me miraban, aunque Lucas decía que nadie me amaría más que él. Lo demostraba a diario. Me regalaba rosas blancas, aunque una vez le había dicho que me gustaban más los tulipanes, pero él decía que las rosas me representaban más porque era el significado de pureza. Sus palabras eran como la miel y me tenía muy enamorada.
En los meses siguientes todo comenzó a cambiar y Lucas se volvió más frío y siempre hablaba por teléfono con gente que no conocía. A veces se ponía nervioso si le preguntaba quién era, pero nunca respondía. Yo asumí que quizás estaba teniendo problemas en su casa. Aunque lo dudaba, pues su madre era muy amorosa y se preocupaba mucho por él. Aquella señora me adoraba y un día en que conversé sobre Lucas y lo que le pasaba, me dijo que prestara atención y que luchara por la relación que tenía con su hijo. Por supuesto, no debía decírmelo dos veces, yo amaba a su hijo con todo el corazón y quería estar a su lado por el resto de mis días, a pesar de lo que las demás personas decían sobre nosotros. Pero todo empezó a cambiar de manera más drástica cuando pasamos los dos años… ¿Quieres que te cuente?
“Qué difícil es ser mujer… ¡Somos todas unas guerreras!”Miro el reloj por quinta vez. Son recién las ocho de la mañana y estoy despierta desde hace una hora. Los cólicos me habían despertado y a pesar de que me he tomado dos calmantes, el dolor apenas ha cesado. He estado tirada en el sofá tapada con una manta y un guatero en mi abdomen. Hace dos meses que no me llegaba la regla, la verdad es que ni preocupada estaba porque… ya saben… estéril. Para sumar a mi desgracia, mi periodo es irregular y se controla solo. Me avisaba que se presentaría con un terrible dolor y ya está. Miro el televisor y me doy cuenta que no he tomado mucho asunto a la película que están pasando, mis quejidos apenas me dejan concentrarme.Cuando Nefertari se levanta, el dolor ya ha disminuido un poco. Aunque para que no vuelva nuevamente, sigo acosta
Vamos a su casa a dejar el auto y luego salimos a caminar un rato. Llegamos hasta un lugar donde hay una fuente de agua que en las noches prende luces, según lo que me cuenta Ulises. Más allá hay una especie de mercadillo y vamos a dar una vuelta. Al llegar veo que hay hartos puestos y muchos son de artesanía. Vamos mirando cada cosa que tienen hasta que me detuve en uno que abundan las joyas de resina ¡Que belleza! Pregunto el precio por un collar en particular que es un corazón en tonos azules y turquesas con una patita de gato en el medio en color dorado, pero al preguntar el precio… decido que más adelante me lo compraría. Entre la licencia de Nefertari, las compras para su bebé y yo, hemos tenido que reducir la cantidad de dinero de las cuotas que le estamos pagando a mi hermano. Además tampoco quiero pedírselo a Ulises, así que lo hago seguir caminando ante
A las nueve de la noche me va a dejar a mi departamento, aunque lo convenzo de que se quede conmigo por lo que va por ropa a su casa. Al entrar veo a Nefertari sentada en el sillón y cuando me ve se levanta a saludarme. Cómo puede eso sí, porque esa panza de siete meses ya le pesa. Le queda solo esta semana y ya comienza su licencia.— ¡Hola Aurora! ¿Cómo te fue?, ¿Dónde está Ulises? — Yo me río ¡como extrañaba a esta cotilla!— Hola Fer, todo fue estupendo. Siéntate y te doy los detalles. Ulises fue a por ropa y vuelve — La hago sentarse y le comienzo a contar todo, omitiendo ciertos detalles. Nefertari se escandaliza por todo y creo también que el tema de cómo jugamos anoche es íntimo.Veinte minutos después y luego de que Nefertari igual se escandalizara un poco, llega Ulises. La saluda y le regal
En el local nos recibe un tipo todo tatuado y lleno de piercings, nos saluda amablemente y yo le comento que quiero un bello tatuaje, me pregunta si tengo algún diseño en mente y le hago saber que quiero una media luna y un tridente en la zona de la clavícula. Entre el hombre tatuado y yo diseñamos algo y el resultado es ¡colosal! Me encanta. Ulises sonríe y mueve la cabeza de un lado a otro por esta locura. Amo a mis bebés gatunos y son mis primeras mascotas desde que me he independizado. Por ello quiero esa media luna y un tridente.El hombre tatuado le da unos últimos retoques al dibujo y lo plasma en mi piel, me consulta si está bien el lugar y afirmo con mi cabeza. Finalmente comienza a pasar la aguja por el dibujo en mi piel y duele, duele mucho pero me aguanto, después de todo el dibujo no es tan grande. Pasada una hora, ya está limpiando mi tatuaje y dándome indicaciones de c&o
“Alguien que te haga sentir especial, la más linda del mundo…no aceptes menos que eso”A la mañana siguiente me despierto dolorida pero feliz. Recuerdo todo lo que he hecho con Ulises y automáticamente se me forma una sonrisa en los labios. Él aún duerme a mi lado, desnudo ¡qué buena vista me da! Está boca abajo tapado solo con la sábana a mitad de cuerpo, decido que lo mejor es seguir durmiendo. Hay que recuperar energías.Cuando vuelvo a despertarme lo primero que veo son unos ojos zafiros que me miran fijamente y me sonríen.— Hola dormilona — Besa mi frente y me tiende una taza de café. Me acomodo y se la recibo gustosa.— Hola psicópata ¿hace cuánto me estás mirando mientras duermo? — Le pregunto divertida. Él pone los ojos en blanco pero al final se ríe.&m
— ¡Dios! Amor necesito estar dentro de ti ¡ya! — Me encanta saber eso. Su tono ronco y desesperado. Pero con la cabeza doy una negativa.— Aun no mi sensual Zafiro — Él se sorprende.Le coloco el antifaz, él no reclama. Comienzo a pasar la pluma por todo su cuerpo, ríe un poco pero no dice nada, lo provoco y finalmente me bajo para arrodillarme ante él. Tomo su miembro con una mano, lo masajeo y con la otra hago lo mismo con sus testículos. Un exquisito gemido sale de sus labios. Avivada por esto introduzco su miembro en mi boca y comienzo a subir y bajar mis labios, lo repaso con la lengua, le doy pequeños mordisquitos. Ulises se retuerce de placer.— Cariño… si no me sueltas ahora me voy a venir en tu boca — Murmura entre jadeos. Yo sonrío traviesa.— Hazlo — Le respondo sacándole el antifaz y mirándolo en mod
Último capítulo