“Cuánto tiempo sin vernos”. Jiang Sese le sonrió, con sus hermosos ojos llenos de calidez.
Jin Fengchen se levantó lentamente, con los ojos fijos en su carita: “¿Por qué estás aquí?”.
Jiang Sese arqueó las cejas y le preguntó en respuesta: “¿Por qué crees?”.
Él... ¿Cómo iba a saberlo?
Jin Fengchen movió los labios como si fuera a decir algo, cuando una voz exultante habló.
“¡Fengchen, realmente eres tú!”.
Una mujer de mediana edad se acercó a él y le cogió las manos, con el rostro lleno de alegría.
“Esta...”. Jin Fengchen miró a Jiang Sese con curiosidad.
“Esta es mi Tía Shang Ying, y también la tuya”. Jiang Sese lo miró atentamente.
“¿Tía Shang Ying?”. Jin Fengchen frunció el ceño, no recordaba en absoluto a esta mujer.
Al ver que no la recordaba, Shang Ying parecía decepcionada. Le soltó las manos y suspiró: “Realmente nos has olvidado a mí y a Sese por completo”.
Al oír el resentimiento en su tono, Jin Fengchen se disculpó sin darse cuenta: “Lo siento”.
Cuando