Capítulo 31.

—Sé que eres el único que vende burundanga en todo Birdwallace —lo señaló con la chupeta—, y sé que esa droga está prohibida aquí por las amenazas del jefe; sin embargo, te permite a ti y solo a ti venderlas, bajo la condición de que su venta sea solo para mujeres.

Fruncí el ceño.

¿Por qué no a los hombres?

—La usan para violaciones —susurró Kade.

— ¿Eh? —emití, confundida, estaba segura de que no lo pregunté en voz alta.

—Tu cara se volvió una de confusión apenas Elle dijo que era solo para mujeres —aclaró—. Lo hacen así porque el "jefe"... —simuló unas comillas—. Odia a los violadores, así que no permite que se venda ese tipo de drogas aquí. Aunque de todas maneras violan, pero él se siente feliz no distribuyendo una droga especial para eso.

Esperen un maldito segundo.

¿Violaciones? ¿Iban a abusar sexualmente de Ford? Era obvio que no lo habían hecho, en el informe forense no aparecía nada de abuso sexual, pero ¿de verdad iba

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