Capítulo 91. Sumido en una pesadilla
-Será difícil contenerme, a decir verdad, estás tan… disponible, ahora, que es tentador. Muy tentador… -aspiró con fuerza-. Y hueles delicioso, dulce… sí. Será difícil. Pero, en el fondo, soy un caballero. Aún así… hagámoslo verosímil…
Luego de ejecutar su plan, se levantó y se quedó de pie mirándola unos instantes. Luego volvió a desaparecer de su vista.
Cuando lo vio de nuevo, ya estaba vestido.
-El efecto durará sólo unos minutos más. Estarás bien, no te preocupes. Adiós, muñeca.
Sin decir nada más, Alex desapareció de su vista, dejándola desnuda, sintiéndose sucia, y con la cama revuelta y manchada con su simiente.
Unos minutos más tarde, Ámbar comenzó a sentir por fin su cuerpo y logró moverse lo suficiente como para levantarse de la cama, asqueada por la situación. Y desesperada por ir a ver a su pequeña hija y comprobar que todos los demás estaban bien.
Sin embargo, se dio un baño en la ducha antes de salir, porque se sentía mancillada y sucia.
¿Qué había sido todo eso? ¿Qué