Capítulo 63: Mi corazón, mi todo se queda con ella.
HOSPITAL.
—Doctora allá afuera están los padres del paciente.
¡Dios! En qué mal momento voy a conocer a los papás de Juan Carlos.
—Voy, por favor esté pendiente de él.
—No se preocupe doctora, su novio se ha convertido en el consentido de la sala.
—¡Dios Santo! Lo van a malcriar, después me lo tengo que aguantar.
Allí están mis suegros, su mamá cuando me ve corre hacia mi con los brazos abiertos.
—Mi niña, ¿cómo está mi bebé?.
—Se está recuperando, muy pronto sale de esta sala.
—¿Y tú, estás bien?
—Si, todavía un poco sorprendida con todo esto, pero estoy bien, ahora lo importante es que Juan Carlos se recupere pronto.
—Señorita Julia, mucho gusto, lamento mucho conocernos en esta penosa situación.
—Mucho gusto señor Huerta.
—Mi niña, ¿será que puedo ver a mi bebé?
—Por supuesto, venga conmigo para que la preparen y pueda entrar a terapia, sólo puede entrar uno.
—Sí, yo entiendo, primero que entre su mamá