Los miembros de la familia Bursin se sentaron en la mesa, Zaya saludó cordialmente al señor, Vanya le dio un beso en la mejilla, ahí pude ver la diferencia con que ella trata a las personas importantes en su vida.

La indiferencia con la que Zaya me trataba la había ganado a pulso, creo que es lo mejor, ella merece un hombre que le de lo que yo no puedo darle, el mundo en el que creció y se desenvuelve es una de las cosas que me es imposible darle.

_ Bienvenidos a todos _ saludó el señor Jalifa _ como cada uno de ustedes saben, desde hace algún tiempo mi hija regresó al lado de su padre después de vivir por varios años en Estados Unidos y desenvolverse como la mejor fisioterapeuta del medio, me llena de orgullo saber que mi Zaya ayudó a muchas personas con los