38

Amelia salió al fin de la cama y se unió a él bajo el agua, y Zack de inmediato tomó la pequeña barra de jabón y la empezó a pasear por todo su cuerpo, su espalda, su cuello, sus senos… se arrodilló frente a ella enjabonando sus piernas y su vientre, tocándola suavemente, intuyendo que todavía estaba irritada.

Quería tocarla mucho, besarla allí otra vez.

Su cuerpo era una tentación constante aun estando vestida, y desnuda y en la ducha, ni se diga…

—No voy a poder cumplir con la excursión —dijo ella con sus ojos cerrados, sintiendo los dedos resbaladizos de él por su entrepierna. Afortunadamente, había tenido el atino de depilarse; ya algo le había dicho que esto pasaría, y estaba feliz.

—¿Por qué no?

—Me duele.

—Has perdido tu himen —contestó &eac

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo