Capítulo 203
Elizabeth asintió y se fue.
Cuando Emma se quedó sola, se sentó pesadamente en el sofá, mirando confundida.
Seguía intentando consolarse. Al menos Elizabeth, a quien había criado, estaba bien. Eso significaba que las cosas no serían demasiado difíciles para ella en el futuro.
Eso hizo que Emma se sintiera mejor.
Amaloa había traído un desayuno nutritivo al hospital para Serena. Cuando llegó, la pequeña aún dormía mientras Melinda la observaba exhausta.
Amaloa colocó el desayuno con cuidado en la mesa junto a ellas. Melinda la miró y esbozó una sonrisa. — «Ammi».
Amaloa preguntó preocupada: — "¿Por qué te ves tan agotada? ¿No dormiste bien anoche?"
— "Anoche, Serena de repente empezó a tener fiebre alta. Yo..." La voz de Melinda se quebró y no pudo continuar.
Amaloa podía adivinar cuál era la situación. Serena estaba en estado crítico.
Su condición había empeorado, y si no se operaba pronto, su vida podría verse comprometida en cualquier momento.
Serena oyó sus voces y abr