Capitulo 5. - Sospechas.

Carlo escuchaba la conversación que su padre tenía con alguien que no lograba escuchar, veía a su padre nervioso por primera vez, se tocaba el pelo con fuerza y hacia gestos agresivos con la mano. — No puedo presentarme, así como así, deben pedir mis servicios, si me adelanto al hecho nos pillaran, si comienzan a investigar caeremos todos. — El que estaba en el teléfono, era uno de los hombres de confianza de Ares concretamente Ben, este se encargaba de las comunicaciones y los Hackeos, todo lo que era Tecnologico.

Hemos escuchado el aviso del chivatazo, justo hace tres minutos ¿Porque demonios no llevas la radio encima? Como nos jodas estas muerto ¿Te queda claro? Coge el aviso y preséntate allí y sálvanos el culo y averigua de una vez quien es el maldito topo o daremos por hecho que eres tú. — Ben enfadado colgó el teléfono, dejándolo con la palabra en la boca, mientras Penelope había escuchado todo lo que se decía en la radio. — Llamando a todas las unidades disponibles, chivatazo de posible entrada de cargamento grande de droga, irán en motos negras, no sabe cuántos, Rock no estará en la entrega, ¿Comisario está disponible? — Penelope escuchaba todo con atención, se volvió a escuchar por la radio como preguntaban por el comisario, de repente su hermano salió rápidamente y se sentó junto a ella, fingiendo que hablaban, Penelope miro a su hermano sin entender porque hablaba de un partido de tenis, asi que puso la mejor expresion que pudo y le siguio el rollo. Su padre salió un minuto después rápido de la cocina maldiciendo por lo bajo, cogió la chaqueta de comisario y se la coloco, cogió de la entrada todas sus herramientas de policía y salió de la casa veloz contestando a la radio, Penelope miro a su hermano de nuevo que se pasaba las manos por la cara.

¿Que has escuchado? — Penelope pregunto muy curiosa. — Hablaba con alguien muy nervioso, nunca lo había visto así, tenía miedo, no entiendo que puede pasar, pero no era alguien de la comisaria ... — Carlo frunció el ceño, quería entender que ocurría. — Por la radio no paraban de llamarlo, no te parece extraño que él no haya escuchado la radio y sabía que debía irse, si no hablaba con alguien de comisaria ¿Con quién lo hacía? — Penelope y Carlo se miraban extrañados, todo lo que estaba ocurriendo de repente era muy extraño, lo dejaron pasar cuando Penelope fue a su cuarto a cambiarse, había quedado con un chico de su instituto, era un chico que le gustaba bastante pero que no le había dado tiempo a hacer mucho más por los acontecimientos, mañana se marchaba a la academia y no lo volvería a ver por casi tres meses.

Habían decidido ir a un bar con más amigos del instituto para despedirse esa noche de ellos, tenía muy pocos amigos ya que le había costado bastante adaptarse, se ducho sin prisa alguna y se dedicó tiempo así misma, había elegido un vestido de tirantes ajustado a su figura hasta las caderas, de ahi el vestido tenía un ceñido que hacía que quedara pomposo, era bastante corto, con un volante que caía en un poco en pico, este era estampado de flores, azules verdes y amarillas, con un poco de naranja y lila., solo se puso ropa interior de la parte de abajo de color negro pues la parte de arriba el propio vestido llevaba la forma, tampoco tenía mucho pecho así que con este vestido no lo necesitaba, se colocó unas sandalias de tacón alto, estas tenían una pequeña tira de perlas casi a la altura de los dedos e iban atadas al tobillo, también con una tira de perlas pequeñas, se sentó en su tocador y comenzó a secar su pelo naranja haciéndose hondas gruesas y abriéndolas consiguiendo un efecto ondulado, se maquillo y se puso un gloss cogió su bolso y bajo al salon de nuevo, cogió su teléfono que había tenido bastante olvidado y vio varios mensajes de Dafne y Leo.

Contesto a ellos en la entrada, su hermano salió de la cocina y quedo asombrado del aspecto de su hermana. — ¿Dónde vas así? — Penelope entorno los ojos y se echó perfume de un tarrito pequeño que llevaba siempre en el bolso. — Voy con Dafne y unos amigos al Club Heaven, para despedirme de ellos ... — Dijo sin mucha ilusión. — ¿Quieres que te recoja luego o que te lleve? — No, no hace falta vienen a por mí. — Carlo levanto una ceja con curiosidad, iba a decir algo cuando un pitido de coche sonó fuera. Penelope se miró de nuevo en el espejo y salió de la casa, su hermano fue corriendo a la ventana para cotillear, después abrió la puerta antes de que Penelope pudo llegar al coche, el chico había salido del coche para abrirle la puerta, los dos miraron a Carlo, Penelope le suplico con la mirada que no dijera nada, pero Carlo no se pudo contener. — Mas te vale cuidarla, que llegue sana y salva a casa esta noche, te recuerdo que somos policías. — Penelope fulmino a su hermano con la mirada, el chico saludo con la mano con cierto nerviosismo asintiendo con la cabeza, Penelope le hizo un gesto para que se metiera dentro y este le hizo caso, riéndose a carcajadas.

Perdónalo, es el imbécil de mi hermano. — Penelope intentaba parecer tranquila. —Tranquila, es comprensible, no dejare que te pase nada, estas deslumbrante. — Penelope sonrió nerviosa, el chico le gustaba de verdad, era muy guapo moreno de ojos verdes y estaba bien físicamente, era buena persona y se lo pasaba bien junto a él, era una pena que mañana debiera marcharse.

Ares se preparaba para salir junto a sus dos hombres, el llevaba la mayor cantidad de droga por si pillaban alguno, habían cambiado a última hora la ruta que haría el, sabía que tenía un topo así que siempre hacia esos cambios de última hora, sabía que la policía estaría escondida en las grandes centrales, pero él contaba con un As bajo la manda y ese era el comisario, llevaba un pinganillo donde le chivaba las posiciones en cada momento, las tres motos se prepararon para salir del garaje a toda velocidad, cada una en un intervalo de tiempo diferente y ruta diferentes, tres bloqueos para despistar. Cuando el reloj marco las ocho la primera moto salió a toda velocidad, el pinganillo estaba activo y empezaba a escuchar las transmisiones de las unidades activas en la persecución, a los cinco minutos salió la segunda moto, esta si fue interceptada al poco tiempo, y comenzaron a seguirle, a los diez minutos era el turno de Ares, este salió a gran velocidad, iba tranquilo por la ciudad cuando escucho que habían visualizado ahora a la primera moto, así que salió directo al puerto con mayor tranquilidad, antes de llegar a este tuvo que esquivar a una pareja que cruzaba por un paso de cebra, casi haciendo que se cayera de la moto, en este momento la primera moto aviso de que estaba a punto de pasar bajo el puente de la autopista principal donde un camion le esperaba para entrar dentro de él y desaparecer, con nerviosismo se llevó a cabo saliendo bien, uno de los suyos estaba a salvo, el segundo estaba de entrar a los callejones donde harían un bloqueo con un camión de la basura así parando la moto, sacando su contenido y resguardándose en uno de los parkings subterráneos donde le esperaba un coche para salir tranquilamente de allí, antes de que esto ocurriera visualizaron a Ares, que aún le quedaban cinco minutos para llegar al puente del puerto, al perder a las otras dos motos todas las unidades fueron a por él, una gran alarma sonó y eso significaba que se estaba cerrando el puente por donde él debía pasar ya o lo cogerían, tenía muy pegados a los policías así que se debía arriesgar, aceleró a todo lo que daba la moto y se dirigió al puente que ya estaba bastante levantado, este sin frenar subió la rampa que se había formado saltando la abertura con la moto, llego al otro extremo del puente pero con dificultad, ya que la rueda trasera había tocado el borde y lo había hecho caer de la moto, se levantó como pudo y se montó en la moto de nuevo mirando hacia atrás, lo había conseguido estaba vivo, se había hecho el silencio ya que sus hombre lo estaban viendo por las camaras del satélite, las sirenas ya se escuchaban lejos y el pinganillo ya no había señal, no se demoró más y arranco la moto de nuevo y fue directo al contenedor donde lo esperaba Cat con otro vehículo, se quitó la ropa que llevaba cambiándose a un traje negro con una camisa color vino, repeino su pelo rubio hacia atrás, se montó junto a Cat en el Lamborghini que ella había traído, colocaron la droga escondida en el falso maletero y se dirigieron a su Club, todo había salido mejor que bien.

Penelope y Leo llegaron a la puerta del Club aparcaron el coche y se dirigieron donde habían quedado con Dafne y los demás chicos, estos ya estaban en la fila, así que se unieron a ellos, estos esperaban para entrar en el club cuando llego un Lamborghini negro y paro justo enfrente de ellos, lo que no se imaginaba Penelope que de ese coche se bajara el hombre que había visto el día anterior, Ares saludaba a los hombres de la puerta con bastante ánimo, del copiloto se bajó una mujer morena de ojos pardos, muy hermosa, que Penelope se imaginaba que era su novia, uno de los hombres que vigilaban la puerta, fue a por el coche y se lo llevo a un garaje cerca de allí, Ares miro la cola a su local y no esperaba ver de nuevo a la de pelo anaranjado, allí estaba tan hermosa como la recordaba, estaba despampanante con ese pequeño vestido de Flores, hizo tiempo para observarla más encenderse un cigarro y hablar con sus hombres, la miro de nuevo e hizo contacto visual con ella.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo