"Querida, me voy a la oficina ahora! Descansa y no te saltes las comidas. Llené la nevera con tus frutas favoritas y otros alimentos. Si pasa algo, llámame de inmediato!" dijo Dalton antes de irse de casa de Laura.

La verdad es que Dalton no tenía ganas de trabajar. Quería pasar más tiempo abrazando a Laura.

La noche anterior, habían visitado a un médico. Después de escuchar su explicación, Dalton se sintió seguro para tener intimidad con Laura de nuevo.

"Vale, ve ya—ya es tarde. No es bueno que un jefe llegue siempre tarde!" dijo Laura mientras arreglaba el traje de Dalton.

"Si te aburres, sal a dar un paseo o a comprar. Aquí—toma mi tarjeta!" Dalton sacó su cartera, tomó una tarjeta y se la entregó a Laura.

Antes, Laura lo habría rechazado. Pero ahora, se lo aceptó con alegría.

"Solo daré un paseo por los alrededores."

Dalton se fue, y Laura lo acompañó hasta la puerta, saludándolo mientras entraba en el ascensor.

Luego volvió a casa y recogió los platos del desayuno.

Todavía no ten