Empiezo a leer el libro para despejar mi mente y no se cuanto tiempo llevo, pero el timbre me saca de mi paz. Me levanto y la persona que toca lo hace repetidas veces, pero ¿qué pasa? ¿Nos invaden los extraterrestres y están evacuando la ciudad o qué? Me acerco y trato de oír quien es, pero alguien maldice del otro lado y reconozco la voz ¡mierda! es Mark. Inmediatamente coloco la mano en la manilla de la puerta pero me detengo y en vez de abrir me doy vuelta y camino hasta mi habitación tomo mi iPod y me coloco los audífonos para no escucharlo.
A las nueve vuelve a sonar mi timbre y estoy decidida a no abrir cuando mi móvil suena y miro la pantalla. Es un mensaje de Gia que me dice que le abra a ella y está sola. Salto inmediatamente de la cama y me dirijo abrir la puerta, mi amiga entra y me abraza fuerte
— ¿Cómo estás? —me susurra
—Bien— miento e intento sonreír, pero no puedo
—Me tenías preocupada. Te eh estado llamando y no me atendías