Paloma frunció los labios. —Esta broma no tiene gracia, Clari. ¿Qué vamos a hacer ahora? Nuestro plan...
La voz de Yannis se escuchó desde atrás. —¿Qué plan tienen ustedes? Paloma, ¿qué travesura has hecho a mis espaldas?
Paloma deseaba abofetearse a sí misma por arrepentimiento, estuvo a punto de revelarlo todo.
Pero Clara, siempre serena, se quitó la mascarilla, dejó sus herramientas y salió de la sala.
—No es nada. No sé si Paloma estaba hablando de apuñalarte mientras dormías o de envenenarte. Ella puede pensar en cien planes como esos cada día.
Paloma suspiró aliviada y le guiñó un ojo a Clara. Qué suerte tenerla a su lado.
Sus personalidades eran complementarias. Clara era fría y controlada, mientras que Paloma era directa y explosiva.
Yannis rió suavemente. —Parece que mi cuñada eres más sensata.
Clara respondió con calma: —El señor Herrera deberías saber que ya estoy divorciada con Diego. Ese título no es apropiado.
—Perdón si fui ofensivo, señorita Suárez.
Yannis empezaba a en