Clara sabía muy bien que Elio la estaba tanteando, pero mantuvo una sonrisa elegante en su rostro mientras respondía: —Si me engañan, aprenderé la lección y seré más cautelosa la próxima vez, no confiaré tan fácilmente en los demás.
Elio no pudo encontrar ninguna pista en su impecable rostro, así que decidió dejarlo pasar y comenzó a presentarle seriamente los paisajes del palacio.
A medida que se acercaban al Hospital Nacional, pudieron ver un campo de hierbas medicinales con flores hermosas.
—Esta es nuestra flor nacional, la Morera. Sus flores son vibrantes y se pueden secar para uso medicinal. Tanto los frutos como los tallos de las flores son comestibles.
Clara intervino: —Sí, he oído hablar de cómo hace sesenta años el país de Cordovia sufrió una catástrofe. Hubo desastres naturales, conflictos militares y sequías que llevaron a una gran escasez de alimentos. Muchas personas tuvieron que salir a las montañas a buscar vegetales silvestres. La Morera, una planta herbácea, tiene una