Mientras tanto, en la habitación privada del bar, Ximena estaba siendo cogida por los dos chicos a la vez, al principio se turnaron, luego decidieron penetrarla uno por delante y otro por detrás, les gusto tanto que lo repitieron varias veces dejando a la mujer más que agotada. En un principio quisieron seguir las órdenes de Daniel, pero pasado un tiempo se desesperaron siendo vencidos por el deseo y comenzaron a aprovechar la calentura de ella para su propio placer. Una vez ella estuvo sobria y sin la influencia de la droga se sintió abusada y ultrajada por los dos desconocidos que usaron la violencia para cogerla toda la noche, sin fuerzas se quedo dormida.
Al día siguiente el sol brilla a lo alto del cielo prometiendo un día bastante caluroso, a eso de las diez de la mañana Ximena se despertó sola tendida en el sofá del salón privado, se vistió y salió del bar con ganas d