―Es una pesadilla. ―Aluhe mantuvo la barrera. ―¿Acaso algo en nuestra familia puede ser fácil?
―No seriamos los mejores si fuera así. ―Kunak sonrió con arrogancia. ―Lo fácil no vuelve fuerte, querido tío. ―Le guiñó.
―Bien, niños. ―Emma se pudo en pie. ―Los ancianos nos han iluminado con su sabiduría