Ya había llegado la ansiada semana 29, Dante como todas las mañanas ayudaba a Alexa a asearse y tomaban el desayuno juntos en el hospital, la bebé seguía creciendo sana y nada habia alterado a mamá.
- Hoy tendremos revisión de nuestra pequeña Angela - Dante le daba de comer a Alexa
- Asi es - Alexa respiraba con un poco de cansancio
-¿Te sientes bien amor? - Dante la miró preocupado
- La verdad me siento cansada.
- ¿Quieres que llame a la doctora? - Dante se puso de pie
- Si, por favor - Alexa se acomodó y cerró los ojos. Dante salió de la habitación y los pocos minutos volvió con la doctora
- Alexa, dime que sientes - la doctora comenzaba a conectar las maquinas de monitoreo para la bebé y para Alexa
- Me siento cansada, como si hubiera hecho ejericicio y solo me levanté para ir al baño
- ¿Alcanzaste a comer algo?
- No mucho - dijo Dante - solo logró comer un poco de fruta... ¿que pasa doctora? - una de las maquinas comenzó a sonar, marcaba la presión de Alexa más alta de lo normal