Aunque su papá había lastimado profundamente a su mamá y él antes lo odiaba, su corazón ahora estaba lleno de gratitud.

Si su papá no le hubiera dado a su mamá su hígado, la habría perdido.

Zhuo Qianyun sonrió. "Sí, él es... un hombre valiente".

Sabía que Ye Wenming ya se había preparado para morir por ella y la bebé en el momento en que quedó embarazada y decidió dar a luz a su hija.

A pesar de que él decidió ser hipnotizado para olvidar sus sentimientos por ella luego, aún así tomó la misma decisión.

Dos días después de hacer los arreglos, Zhuo Qianyun tomó el tren de alta velocidad a la Ciudad L con su maleta en la mano.

No tenía el nuevo número de teléfono de Ye Wenming así que solo podía llamar al abogado. "Quiero ver a Ye Wenming y hablar con él personalmente sobre el divorcio".

"Me temo que eso va a ser un problema. El Señor Ye está demasiado ocupado con el trabajo para venir a la Ciudad de Shen", dijo el abogado, sintiéndose preocupado.

"Está bien. Iré a la Ciudad L. Ya