Todo esto estaba ocurriendo en su propio crucero. Si Skylar moría allí, afectaría gravemente a toda su familia.
El mundo empresarial era despiadado. No podía confiar en nadie.
La gente podía parecer amable, pero aprovecharía cualquier oportunidad para pisotearlo.
Su abuelo, quien siempre había mostrado cariño por Skylar, quedaría devastado si algo le pasaba.
La mente de Dave estaba llena de pensamientos contradictorios.
Entonces, Skylar le lanzó un ultimátum.
—Dave, te lo pregunto por última vez. ¿Estás de acuerdo o no?
Parecía haber perdido por completo el sentido de la razón. Solo tenía una idea fija en la cabeza.
Y en ese punto, no dejaría ir a Dave fácilmente, aunque eso significara perder su propia vida.
Su desesperación creció aún más al ver que Dave permanecía en silencio durante largo rato.
Soltó una carcajada amarga, seca y cortante en medio de la noche.
—¿Qué pasa? ¿Crees que estoy fingiendo? ¿Se te olvidó que no tengo familia ni nada que me ate a este mundo? Solo tú