El Narrador:

Brad, se levantó y dejó que Jennifer siguiera durmiendo, por lo visto la jornada del día anterior la había agotado. Esa mañana, recibió una invitación de parte de uno de los ganaderos de la región para que asistiera en horas de la noche a una velada a orillas de la piscina, por el cumpleaños de una de sus hijas.

Él, acostumbrado a participar en cuanto evento social era invitado, de inmediato envió su respuesta afirmativa al mismo. Una vez, que Jennifer bajó a desayunar le informó sobre la invitación y el rol que ella debía asumir.

—¡Espero hayas descansado! —Deseó él— Hoy comienzas tu rol de esposa aquí en Ciudad Frontera. Estoy invitado a un cumpleaños, en la hacienda de un vecino, por lo tanto, debo acudir acompañado de mi esposa —aludió este, con una sonrisa.

—¡Perfecto! —Contestó Jennifer— ¿Me puedes ayudar a decidir que ponerme? —Interrogó, dispuesta a complacer a este, pues hasta ahora, se ha portado muy lindo con ella.

—Me voy a vestir informal y de blanco, haz tú