Tres años han pasado desde aquel ridículo suceso, creo que eso es lo más tétrico que me ha pasado en la vida.

Esa chica rara estaba loca, aún pienso en que hubiera pasado si no me despierto a tiempo, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo de solo imaginarlo.

— Tierra llamando a Domenic — Me llamo Darcy.

Yo lo quedé mirando, él se veía muy divertido.

— Estabas sonriendo — Me dijo.

Yo le di un gruñido de desaprobación.

¿Sonreír yo? Eso lo dudaba demasiado, pensar en ese día era todo menos divertido.

— Me da curiosidad saber que fue eso tan bueno que recordaste para que sonrieras de esa manera — Me preguntó con una sonrisa de burla.

— Deja de molestar Darcy, hoy no estoy de humor — Le dije.

El teléfono de la oficina sonó y yo atendí de inmediato.

— Señor Hanson, el señor Lefèvre está aquí y quiere hablar con usted — me dijo la secretaria.

¿Esto era un mal presagio? Acababa de pensar en ella y ahora tenía aquí a su padre.

— Dile que pase — Le pedí a mi secretaria.

— ¿Desde cuando haces negocios con él? — Me preguntó Darcy.

— Estoy tan sorprendido como tú, pero no está de más atender a un hombre tan importante como Claudio Lefèvre — Le dije.

Darcy puso mala cara pero después asintió con la cabeza.

La puerta de mi oficina se abrió y entro el señor Lefèvre, él me sonrió y se acercó.

Yo me levanté y lo saludé dándole un apretón de manos.

— A que se debe el honor de su visita señor Lefèvre — Le pregunté mientras volvía a mi asiento.

Claudio se sentó y me sonrió, él era un poco parecido a su hija, tenían la misma sonrisa, esa sonrisa siniestra, tal vez él también sea un asesino en serie.

— He escuchado de buena fuente que su empresa estará a cargo de la remodelación de Catswold charm hotel ¿es eso correcto? — Me preguntó.

— Pues déjeme decirle que tiene muy buenas fuentes señor Lefèvre — Le respondí.

— Pero aún no entiendo a que se debe su visita, ¿quiere invertir en el proyecto? — Le pregunté.

Claudio nego con la cabeza, pero sin dejar de sonreír, ahora yo estaba un poco más confundido ya que él estaba involucrado en los negocios de marcas de lujo, y no en este tipo de negocios.

Claudio se removió en el asiento y después puso una expresión de seriedad.

— Mi pequeño angelito necesita hacer sus pasantías, y se que su empresa es la mejor en el rubro de decoración de interiores, ella es muy inteligente, capaz y muy educada, se que le sería de mucha ayuda — Me dijo.

Yo intenté no reírme, él definitivamente no conocía a su "pequeño angelito”.

— ¡Vaya! su hija debe ser un prodigio entonces — Le dije con sarcasmo.

Él hombre elevó su pecho con orgullo y asintió con la cabeza.

— Ella es perfecta, y se que con usted hará un buen trabajo, la mejor para el mejor — Me dijo.

Darcy estaba en completo silencio observandonos.

Yo quería decir un par de cosas, pero era mejor quedarse en silencio.

— Lo siento, pero no doy pasantías a nadie — Le dije.

Claudio respiro profundo, empezó a tamborilear sus dedos en el descanso de la silla, definitivamente si parecía un asesino en serie.

— Piense que si yo hablo bien de usted con mis socios y conocidos, su negocio se elevará como la espuma — Me dijo.

Yo sonreí sin gracia.

— ¿Es un soborno? — Le pregunté.

— Usted tómelo que mejor le parezca, pero sabe que sería muy bueno, no solo a nivel nacional, si no global. tampoco quiero que le dé un trato especial solo por ser mi hija, así que si eso es lo que le molesta, no se preocupe, quiero que la trate como a un más de sus empleados— Me dijo.

Yo sonreí.

— piénselo, esto le convendrá muchísimo a usted — Me dijo.

si, sería bueno para mi a nivel monetario, porque el reconocimiento a nivel global ya lo tenía, no es por presumir, pero yo soy exelente en lo que hago.

— No sea tonto, sabe que será un buen negocio — Me insistió.

Yo le di una pequeña sonrisa, pensándolo bien si sería un buen negocio, y más si voy a tener a esa tontilla cerca mío, la haré llorar lágrimas de sangre, se va a arrepentir hasta del día que nació.

—Usted tiene razón, sería un imbécil al no aceptar, por favor dígale que si ella quiere trabajar conmigo, yo estaré encantado de recibirla aquí — Le dije.

Claudio se levantó de la silla, me tendió la mano, yo me levanté y le di un apretón.

Él se veía muy satisfecho con nuestro acuerdo.

— Mañana estará aquí a primera hora, le va a encantar, se que se llevarán muy bien — Me dijo.

Yo asentí con la cabeza, Claudio Lefèvre se despidió de nosotros y salió de la oficina.

— ¿Que carajos fue eso? — Me preguntó Darcy.

— Solo estoy haciendo un favor — Le respondí.

— Un favor que te dejará millones, pero no entiendo por qué aceptaste — Me preguntó.

— Me dejara millones, lo acabas de decir — Le dije a Darcy con un encogimiento de hombros.

— Sabes a lo que me refiero — Me dijo.

— Solo quiero apoyar a su pequeño angelito — Le contesté.

Darcy me lanzó una mirada escéptica, evidentemente dudando de mis intenciones.

— No me mires así, Darcy. Además, ¿qué podría salir mal? — le pregunté con una sonrisa irónica.

Él se rasco un poco el cuello y después se levanto.

— No lo sé, pero es muy raro que tú quieras hacer un favor, así te deje millones — Me dijo.

— No te preocupes, se lo que hago — Le dije.

— ¿conoces al angelito? — Me preguntó.

Yo sonreí de medio lado.

— Apuesto a qué ese angelito te hizo algo — Me dijo.

Yo me encogí de hombros otra vez.

— ¡Sabía que había algo más! — Me dijo.

— ¿Y ese angelito quien es? — Me preguntó.

— ¿Te acuerdas de mí querida prima Kendall? — Le pregunté.

Darcy cerro los ojos por un momento y después asintió con la cabeza.

— Se supone que la ibas a dejar en paz — Me recriminó.

— Yo la deje en paz, y lo seguiré haciendo, pero nunca dije nada de dejar en paz a sus amigas, y esa tontilla me debe una — Le dije.

Darcy nego con la cabeza claramente enojado.

— No te metas en líos — Me advirtió.

— No te preocupes, después que haga lo que quiero con esa tontilla la desechare como lo hago con todo lo que me molesta — Le dije.

Darcy respiro profundo, se despidió de mi y salió de mi oficina.

Yo sonreí satisfecho, después de tantos años por fin iba a tener mi venganza, y la iba a saborear completamente.