A la Deriva 10
…
—ahora si va a ver este, ya me tiene harto, es mi oportunidad para sacármelo de encima—
Así con mucho sigilo Theo siguió a Leo…
Muy campante Leo fue hacia la orilla a lavarse un poco, después se dirigió a un lugar apartado donde había barrancas.
Se sentó como indio y comenzó a contemplar las estrellas…
—¡ahora si vas a ver conchudo!— gritó Theo abalanzándose sobre Leo.
—¡¿qué, qué?!— gritó Leo asustado, pero Theo ya estaba encima de él.
—¡es la primera y la última vez que te metés conmigo cajetudo!— gritó Theo Clavándole profundamente la daga en el costado…
Leo lanzó un grito desgarrador.
—¡chinga tu madre! ¡Mierda!— gritó con dificultad Leo y en ese momento sus ojos empezaron a brillar de un naranja muy intenso, como llamas.
Impactado ante ese hecho inesperado Theo se echó para atrás.
—¡¿qué m****a?!—
Con dificultad Leo se incorporó y aún gritando comenzó a arrancarse a girones la piel de la cara, los brazos etc…
Quedando todo su cuerpo en carne viva y