C86-PROMESAS Y UNIONES.El salón estaba lleno de murmullos elegantes, copas chocando y risas. Hombres de traje impecable hablaban de negocios, mujeres con vestidos deslumbrantes se movían como si fueran parte del decorado.Y en una esquina, Gideon permanecía quieto, con el rostro impasible, aunque por dentro analizaba cada detalle. El mundo humano le parecía caótico y superficial, pero había algo que debía admitir: esa capacidad de fabricar medicinas que podían salvar vidas era admirable. Incluso los lobos sufrían enfermedades, y si los humanos habían encontrado la forma de controlarlas, tal vez no todo en ellos era tan inútil.—Sonríes… pareces un viejo viendo a los cachorros descubrir el fuego por primera vez —comentó Tobias, con una mueca divertida.Gideon gruñó bajo, pero antes de responder, un mesero pasó frente a él y tomó una copa de la bandeja. No sabía lo que era, pero necesitaba licor. Bebió un sorbo y frunció el ceño, no tanto por disgusto, sino porque el sabor le resultaba
Leer más