Intento con todas mis fuerzas golpear al tipo que lastimó a mi hermano, pero apenas le puedo pegar, el segundo me quita el bate con agresividad, y me carga lejos de este. No me quedo quieto, lucho con todo lo que tengo dando patadas y gritando que me suelte. No me suelta. El otro está hablando con alguien al celular en una esquina.Adela va corriendo a donde está Dan, tirado en el suelo quejándose del dolor. Apenas se puede sentar.—¡No tienen que usar la fuerza! ¡Ya les firmé los papeles! ¡Lárguense! — menciona ella intentando tocar a Dan.Mi hermano no se deja tocar, le mira con un gran asco.—¿Firmaste los papeles? ¿Por cuánto vendiste a tu hijo? — cuestiona sonando traicionado.—Podremos mudarnos de esta pocilga, hijo. Tu hermano vivirá en una mansión. ¿No te das cuenta que a todos nos conviene? — asegura ella apasionada.—¿A todos o a ti? ¡Damián me necesita! — le grita Dan.—Y lo podrás seguir viendo, no lo están secuestrando idiota — agrega Adela, ve desesperada a donde estamos

Los días en la mansión Brown pasan con una rapidez inaudita. Quizás sea la desconexión absoluta que hemos tenido con el mundo exterior lo que nos ha ayudado a tener ese tipo de sensación. Damián ha estado alejado de su computadora, celular, y de las noticias. Las únicas veces que se ha contactado con el exterior ha sido con su abogado y sus empleados en los primeros días para resolver temas económicos. Después de eso, absolutamente nada.En cambio, yo, admito que he hecho algo de trampa, sin embargo, se me ha sido inevitable para monitorear la situación. A casi dos semanas del despido y escándalo por la condición mental de Damián, los titulares en la prensa han cambiado a sospechas atroces. Algunos sospechan que se fue a algún paraíso fiscal con dinero robado; otros dicen que se ha suicidado. Algunos otros comienzan a cuestionarse, si han sido muy duros con las críticas a éste.No me digas. Imbéciles.Como es de esperarse, soy la primera entusiasta por el cero contacto con el exterior

Narrado por DanSé que no tengo mucho tiempo disponible, y que estoy en una carrera contra éste. Así que, logro salir nuevamente y tomar el control a la hora perfecta. Despierto con la habitación a oscuras y con mi princesa al lado profundamente dormida. Al mirar el reloj, lo he vuelto a hacer de forma correcta.Me levanto de la cama con mucho cuidado, el suficiente para que ella no se despierte. Aunque, quien sí está despierto es Junior, que anda aferrándose a las barras de su cuna, lo puedo ver intentando salirse de allí. Camino a él y lo termino cargando sin hacer ruido.—Shhh, shhh, no despertemos a mamá — le susurro para tranquilizarlo.Superviso que Leonora no se haya despertado, y no lo ha hecho, sigue profundamente dormida. Después, abro uno de los compartimientos del closet de esta habitación, ese donde he escondido el celular que uso para comunicarme con el exterior. Lo meto en el bolsillo de mi pantalón, y también localizo el morral que tenía escondido con algunos básicos.

Narrado por DanVeo todo como si fuese una película: cómo sacan en una bolsa el cadáver de Jeremy, cómo se llevan escoltado a Tom que dice incoherencias y cómo Luciano habla con uno de los agentes de la policía. Esto no es nada de lo que imaginé o en lo que pensé antes.“Entonces, ¿admites que eres un imprudente?”Miro a la izquierda o a la derecha para ver quién me habló. Pero no hay nadie cerca. Incluso el vecino que vi al llegar, está despachando de su entrada al agente que le está pidiendo declaraciones. Éste se acerca a dónde está su compañero con Luciano.“Seguramente eran adictos. Mira la condición de su casa” Vuelvo a voltear para ver si alguien me habla, aquí es donde me percato de que la voz viene de mi cabeza. Me la toco con ambas manos. Sumamente preocupado.—¿Ahora también soy esquizofrénico? — susurro.“Serás imbécil”—¡Oye, no me llames imbécil! — protesto.Nadie me responde, y cuando Luciano viene hacia mí, tengo que fingir que no estaba hablando solo.—Nos tenemos qu

Despertarme sin Damián a mi lado, y después enterándome de que había sido controlado por Dan para enfrentar a los asesinos de Danye, fue una montaña rusa dentro de una casa de horrores. Con lo anteriormente descrito, pensaría que no se puede empeorar la situación. Pero cuán equivocada estuve porque como si ya no fuese suficiente, la aparición de Charlotte terminó de armar la feria de atracciones.Estoy observando a esos dos en aquella mesa a la distancia, intento hacer honor a mi palabra, de ser la “madura” de esto, es complicado. Yo podré estarme muriendo de los celos, hirviendo a más no poder por buscar un bien mayor, aun así, mi padre, que está a mi lado, más emocionado no puede andar en su celular.—¿Qué te tiene tan emocionado, papá? — le pregunto intrigada.—Mi regreso a lo mío, será por los cielos. Tan sólo imagina: “El baba yaga salió del retiro para derrocar al rey de reptilianos” — responde.Papá no puede estar hablando en serio, aunque por la cantidad de llamadas y textos q