—Ya nos habíamos visto antes.— Dijo Clarisse en un tono claro de impotencia. No estaba asustada de tener un cañón de pistola apuntando a su cabeza.—Pero no habíamos tenido esa oportunidad de tener está cercanía.— El rostro de Daphne debajo de esa fuerte lluvia y abundante oscuridad, se notaba lleno de emoción por la reciente adrenalina, —¿No te acuerdas que tú y yo tenemos asuntos pendientes desde hace años?—Esas cuentas quedaron en el pasado.— Contestó Clarisse, entrando en un estado de preocupación, —La chica que está a mi lado necesita un médico urgente y...Daphne apuntó el arma en dirección a Ariadne Lizbrook y le disparó a la altura del pecho. La bala impacto en esa área y Clarisse ahora entrando en un estado de desespero e impotencia mucho más elevado.—Ay, creo que ya la chica no necesita al médico.— Comentó Daphne a modo de burla, —Bájate del auto. Te vienes conmigo o vas a acabar igual que ella.—Te juro que vas a pagar por todo el daño que nos estás haciendo y espero que

Época actual...—¿Crees que este sea un lugar altamente seguro para poder permanecer un tiempo escondido?— Ignacio Longwoth estaba parado justo delante de un inmensa ventana. En el exterior se podía admirar la extensa vegetación que estaba envuelta en una fuerte lluvia y abundante oscuridad.—Es casi imposible que ni los propios militares o la gente del gobierno se puede meter hasta acá.— Contestó Riccardo Moretti que con abundante paz se estaba comiendo una manzana, —Así que no tengas miedo y no es necesario que duermas con un ojo abierto. Al menos que la policía te capture.—Tú siempre con tus comentarios innecesarios en momentos de seriedad.Riccardo Moretti mordió la manzana. Al mismo tiempo que levantaba una de sus cejas. Sus brazos estaban tatuados y apenas era visible pequeños fragmentos de una barba recién rasurada y que en cuestión de días reaparecería en esa zona de su piel.—¿Por cuántos tiempo van a permanecer acá tu mujer y su otra amiga?— Riccardo lanzo la manzana detrás

—¿Me vas a matar o qué?— Preguntó Raquel directamente. —¿Qué? ¿Cómo crees eso?— Contestó Jude con normalidad, —No soy una asesina y si te quisiera matar ya lo hubiera hecho desde hace mucho. —¿Entonces que quieres?— Preguntó Raquel, —Deberías estar buscando a tu hermana que está probablemente secuestrada. —Para eso he regresado. Pero necesito que ambas trabajemos en conjunto. Raquel frunció el ceño. —Clarisse te cree muerta desde hace casi siete años. Ahora apareces porque la quieres ayudar, ¿A qué se debe tu regreso, Jude? —Llevo toda mi vida esperando este momento. Quiero reencontrarme con Clarisse para explicarle muchas cosas. —¿Sabes cómo puede reaccionar ella si te vuelve a ver?— Raquel sonaba decepcionada, —Pero si quieres salvar a tu hermana, puedes contar conmigo. —Muy bien vámonos de aquí. No quiero que nadie me vea.— Dijo Jude, —En el camino puedo ir contándote todo. Durante el recorrido Raquel iba concentrada en el tránsito con ambas manos apoyadas en su vo

Ariadne no le parecía gracioso el comentario de Yesenia. La muerte de Ignacio Longwoth no le había afectado en lo absoluto, sino que le estaba trayendo un gran alivio y una sensación de paz. —Sabes que ese señor nunca fue mi padre. —Claro que sí lo era. Llevas su sangre y eso es algo que no se va a borrar de una manera así tan sencilla.— Dijo Yesenia regresando y mirándola de manera rencorosa. —Una cosa es que me haya engendrado y una cosa totalmente diferente que me haya criado.— Habló Ariadne, —Ignacio Longwoth no fue un padre para mí y lo considero como lo peor de toda mi vida. —Puedes pensar lo que tú quieras. Pero la realidad está clara y eso no la vas a poder cambiar.— Dijo Yesenia con seriedad, —Ahora me voy y espero te vaya de maravilla con ese bebé. Ariadne Lizbrook no hizo nada en absoluto para detenerla. Había decidido dejar las cosas así, al menos por ahora y que más adelante se arreglarán. Pero sí sentía una sensación de vacío y culpabilidad, sabía que las consec

—Yo siempre he sido altamente creyente de que la justicia tarda. Pero llega.— Raquel observaba a Malak sentada detrás de esa enorme mesa con ambas manos esposadas, —¿Cómo te preparas para vivir acá en tu nuevo hogar?—¿Es qué tú crees que de verdad estando acá encerrada tú vas a vivir segura?— Malak hizo esa pregunta y parecia desafiante.—No me puedes hacer nada porque te vas a pudrir en la cárcel por asesina y por ladrona.— Raquel se sentó y golpeó la mesa con fuerza, —¿Por qué no me dices cómo y por qué mataste a mi hermana Laura? ¿Fueron celos? ¿Es qué acaso Ignacio había planeado dejarte por ella?—Tú no tienes conocimiento de las cosas. Las cosas fueron así y lo que le pasó a Laura fue producto de su decisión y porque se lo merecía.—¿Entonces te mereces pudrirte acá en la cárcel por tus decisiones?—En realidad no me afecta en lo absoluto.—Quizás ahora. Pero a largo plazo vas a sentir culpabilidad y un remordimiento de conciencia. Ignacio está muerto y Rodrigo no quiere volver