｡ ٬٬⌠ Claudia ⌡‧₊˚—Cuénteme entonces sobre sus aptitudes y por que cree que será buena para este trabajo.Las preguntas de esta entrevista de trabajo ya me estaban volviendo loca, en primer lugar, estaba frente al hombre con quien tuve un encuentro casual un año atrás y para colmo era el padre de mi hija de tan solo tres meses, todo esto se estaba combinando y me sentía tan nerviosa que no podía parar de menear mis piernas mientras pensaba en que podía decir.—Soy organizada, siempre tomo la iniciativa, paciente, cordial…— Apreté mis labios un momento. esto se me estaba saliendo de las manos y no podía parar de pensar en que carajo me había metido, si tan solo hubiera puesto mi solicitud de trabajo en otro lado —respetuosa, empática, creativa, social y tiendo a actuar rápido ante las situaciones que me sean dadas.Él me miro en total silencio, sabía a la perfección que se acordaba de mí pero aun así sabía que no le había interesado para nada, puesto que nunca me escribió, ni siquiera

｡ ٬٬⌠ Claudia ⌡‧₊˚Lo observé bastante nerviosa luego de lo que acababa de pedir pero aún así no tenía otra cosa que hacer, sino cumplir con lo que me pedía.—Un momento…—Llévame con la niña.Le miré con algo de enojo para luego asentir y suspirar poniéndome en pie. me relamí los labios más que nerviosa y lo guie hasta ingresar sin saber exactamente cuáles eran sus intenciones, tan pronto entre mis pequeños sobrinos me saludaron, con felicidad al verme volver.—¿Dónde está Venus? —le miro algo nerviosa a Leila, mi pequeña sobrina de 8 años. Después de todo estaba jodida y no sabía realmente qué hacer.—En su cuna —me sonrió Leila.—Esta bien princesa, gracias.Le acaricié los cabellos como agradecimiento y lo guíe a mi habitación, al verla en la cuna dormida cómodamente la levante con cuidado notando como se quejaba y abría los ojos mirándome.—Perdón por despertarte mi amor —le susurre y me acerque al enseñándole a nuestra pequeña e inofensiva hija.Era tan pálida como él, compartían

｡ ٬٬⌠ Claudia ⌡‧₊˚La mañana transcurrió tranquila mientras me organizaba para ir al trabajo, me sentía nerviosa siendo sincera, luego del beso de ayer, de los sentimientos que me golpearon tan pronto como tuve aquel contacto con él y que ahora que él viera a mi hija, y de forma constante me hacía querer ni siquiera ir a dicho lugar, pero sabía que debía hacerlo, de eso dependía el futuro de Venus y deseaba con todo el corazón lo mejor para ella. Luego de elegir el vestido perfecto, blanco, delicado y estilizado junto al abrigo crema sujeté el bolso rojo de marca el cual que había regalado mi antiguo jefe por mi cumpleaños pasado, me sentí segura y un tanto más lista para afrontar al jefe y padre de mi hija hoy. Me despedí de mi pequeña Venus para marcharme lista para el nuevo día. Una vez presente las encargadas de talento humano me dieron una pequeña inducción, una que se extendió desde las nueve de la mañana hasta el mediodía, dónde me permitieron ir al puesto de trabajo de mi je

｡ ٬٬⌠ Claudia ⌡‧₊˚La noche pasó rápidamente, había dormido bien a pesar de la incomodidad del sillón, él la pasó pendiente de nosotras toda la noche lo cual me dio tranquilidad y alegría. Tan pronto se dieron las cinco de la mañana el doctor ingresó a la habitación para darnos la buena noticia de que Venus sería dada de alta y nos dio algunas recomendaciones junto a los medicamentos que debíamos darle y los horarios. Connor se hizo cargo del papeleo mientras yo de la niña y una vez que salimos el mismo me llevó a mi casa.—Creo que tendré que conseguir una nueva niñera, siempre he sido cuidadosa con Venus, es la primera vez qué la dejó en manos de alguien no soy yo y ocurrió esto.—Yo me encargaré de buscar una buena niñera para ella, dame un día, por hoy puedes llevarla a la oficina, no tengo problema en eso, pero primero vamos a que descanses un poco y te alistas para el trabajo, tengo otra cosa que decirte pero eso será más adelante.Asentí en silencio quedando bastante curiosa por

｡ ٬٬⌠ Claudia ⌡‧₊˚Las lágrimas no pararon de caer por un buen rato, era un idiota ¿Cómo se le ocurría tratarme de dicha forma? Intentaba ser amable con él y él me trataba como si fuera un trapo viejo el cual no valía la pena y solo se debía desechar. Estuve en el baño unos cinco minutos, escondida en uno de los cubículos mientras pensaba lo que me había dicho en la oficina.—Claudia —al escuchar su voz cubrí mi boca intentando hacer el menor ruido posible —Sé que estás aquí, sal o comenzaré a abrir las puertas a la fuerza hasta encontrarte.—Lárgate —dije molesta —no puedes estar en el baño de las mujeres como si nada, no está bien, vete ya.—Puedo estar donde desee en este edificio, recuerda que es mi empresa, ahora abre la puerta o la tiraré al suelo.Suspiré frustrada y abrí la puerta, él estaba ahí, frente al cubículo mirándome directamente, se notaba arrepentido, pero yo estaba lo suficientemente molesta como para prestarle la suficiente atención a aquello.—Tenemos que hablar —s