El millonario árabe Alí, se había llevado a Alina, a esa ostentosa habitación, para hablarle de su propuesta, sabía que ella era una mujer occidental, que sus ideas y crianza eran diferentes a la de las mujeres de su cultura, pero el dinero era un idioma universal, estaba seguro que su propuesta sería bastante tentadora para la hermosa mujer— Alina, se quedó clavada en su sitio cuando escuchó a su espalda la imponente voz de Dorían, de a poco volteó a verlo, lo que encontró en su mirada le erizó la piel, estaba realmente furioso, tanto, que incluso si trataba de ocultarlo, no podría— ¡Cállate Ali! — quería poder arrancarle la lengua a ese árabe bastardo que estaba intentando robarme a mi mujer, que no le quedó claro cuando le dije que ella era solo mía, ¿quién le dijo a ese imbécil que necesito casarme con ella para ser su dueño? — Dorian, quería asesinaría — Dorían, Alina y yo, solo estábamos conversando, ella es una mujer... muy interesante, aunque no es como las otras mujeres que

A la mañana siguiente, todo parecía haber sido un mal sueño, el árabe Alí, su ofensiva propuesta de ser su cuarta esposa a cambio de dinero y una mansión, ¿cómo pudo siquiera pensar en que ella aceptaría una proposición tan vergonzosa?—Alina despertaba de su agotadora noche con Dorian, la joven diseñadora se revisó bajo las sábanas, estaba desnuda y mojada del semen del demonio emperador, entonces lo supo, lo que pensó había sido un sueño subido de tono, había sido real, había hecho el amor con el ceo Montana de nuevoAunque ella trataba de evitarlo, él imponente hombre convencía a su cuerpo con sus caricias y sus ardientes besos, era un seductor nato, se regañaba cada que sucumbía a él, pero así estaba estipulado en el contrato, que sería su mujer cuántas veces el quisiera por dos meses La diseñadora se puso de pie para ir al cuarto de baño a ducharse, el agua caliente que caía limpiaba de su cuerpo lo que el CEO había dejado en ella, se preguntaba cómo alguien puede odiar y querer

Todos en el lobby se quedaron serios, si dejabas caer un alfiler se podía escuchar el sonido sin problema, los guardaespaldas estaban tensos, sus órdenes eran proteger a la bella diseñadora de quién sea, más no sabían si actuar contra su propio jefe, el Ceo Dorian, le estaba haciendo daño a Alina— ¡Sueltame Dorian, me estás lastimando! ¿qué diablos es lo que te sucede? ¡si realmente piensas que me iba a escapar con el señor Mohamed, entonces terminemos con esto de una buena vez, me iré de aquí por mi cuenta! — ¡Suelta a Alina, Dorian, ella dijo la verdad, yo era el que estaba por salir al ella decirme que no aceptaba ser mi esposa! no te voy a dejar que la lastimes, creí que decías saber la clase de mujer que era ella — el millonario Ali, podía ser del medio oriente y todo, pero no le gustaba lastimar a las mujeres ni permitía que lo hicieran en su presencia— El Ceo se quedó viendo fijamente a la mujer que tenía un rictus de dolor en su bello rostro, por un un momento más, — ¡vámon

El ambiente en el auto era pesado e incómodo, Rodrigo no podía evitar sentir celos, el odiaba a Alina, por qué ella jugo con él, se veía con hombres mientras él regreso a Estados Unidos a hacerse cargo de las empresas de su familia, él anhelaba que el tiempo pasara pronto y poder tenerla de nuevo junto a él, fue la más grande de las desilusiones cuando Sofía, le dijo que el investigador privado que contrató le dijo que Alina se divertía sin medida sin respetar el noviazgo que tenían— Fue Sofía, la que le ayudo mientras él estaba deprimido, era ella quien con su cariño y ternura logro sacarlo de su tristeza, pero por más que quería quererla sobre todo ahora que llevaba a su hijo en su vientre, no podía olvidarse por completo de Alina— ¡Déjalo, Alina, es por todo sabido que ese hombre poderoso, ha tenido a docenas de mujeres de amantes, solo va a destruirte, no vuelvas a verlo! — aunque no debía preocuparse por ella, no quería que terminara mal por culpa de Dorían Montana, el no era b

La diseñadora, a pesar de lo que había pasado entre ellos por la noche, seguía pensando en que un hombre como ese demonio controlador, no era para tener una relación, ella solo había sido una más de sus amantes, o una mascota con la cuál imponente empresario, se entretenía, pero fue solamente eso— ¡No quiero verte Dorian, el negocio entre nosotros ha terminado! ¡sal de mi vida de una buena vez! — Alina, estaba enfadada, no se le borraba de la memoria, cómo el cruel y frío Ceo, la había hecho verlo con otra mujer, le restregó en su cara que ella era una amante más, pero también sabía que no podía ser más que eso para él — ¿Piensas que por una pelea, lo de nosotros de va a acabar? eres demasiado ingenua, mujer, eso no va a pasar, tu y yo vamos a seguir juntos — habló Dorían, con total tranquilidad— ¡Escucha, cumplí al pié de la letra todo lo que pediste que hiciera, firme el contrato incluso si pensaba que era demasiado injusto y que estabas abusando de tu poder, fue todo para que en