Celos costosos

*Uziel*

Estos últimos días han sido una tortura, Valborg solo piensa en tenerla y no me ha dejado en paz, pensar en ella me vuelve loco, intentar ir a hablar con ella es igual a ponerla en peligro ya que tengo miedo de que mi Lobo se le ocurra hacer algo para lo cual ella no está preparada aún.

—Thessa es hermosa—dice mi Lobo otra vez.

—Ya cálmate, solo es una cachorra—digo a Valborg y este solo se ríe.

—Ella nos reconoce, ¿Cuál sería el problema de marcarla?—pregunta mi Lobo después de reírse.

—Tiene dieciséis años, no está lista para soportar la marca de un Alfa Real—digo a mi Lobo y este solo me ignora.

Lleva los últimos tres días con lo mismo, quiere ir a marcarla y poseerla de una vez por todas.

Leo documentos con la poca concentración que me deja Valborg, ya que por mi cabeza lo único que pasa son imágenes de Thessa en distintas posiciones, con ropa, sin ropa, haciendo ejercicio, comiendo, duchándose.

—¿De verdad Valborg?—pregunto a mi Lobo cansado de su tortura.

—Te recuerdo que mi imaginación es tu imaginación—dice Valborg muy tranquilo.

—Sí, pero yo al menos tengo algo de autocontrol—respondo con orgullo.

—¿Algo? En la menor de las oportunidades te lanzaras encima de nuestra Luna—asegura Valborg satisfecho.

No le respondo solo me quedo pensando en que estará haciendo ahora mi Luna, ¿se estará duchando? 

O quizás esté estudiando. 

El director de la escuela de la manada me dio un informe sobre sus calificaciones, son excelentes. 

También me llego un informe sobre sus actividades extracurriculares y no me sorprende que haga lo que haga es extraordinaria, gano varios premios en natación y atletismo. 

Vale aclarar que los Lobos no competimos contra humanos, sino seria obvio que somos especiales, en nuestras Manadas tenemos todo lo necesario para tener una adolescencia normal, ya desde los cinco años a los cachorros se los obliga a aprender defensa, al igual que si los padres o los ojeadores ven potencial en los cachorros a menor edad se les da el entrenamiento adecuado de acuerdo a sus capacidades. 

Desde que conocieron a Thessa las apariciones de los otros dos ancestrales ha sido mayor, Dimitra Sokolov se ha vuelto más visible en los últimos cinco años que en los anteriores quinientos años atrás.

Uno de los Lobos de la guardia golpea la puerta del despacho sacándome de mis fantasías con mi Luna y con rapidez respondo que pase.

—Alfa tenemos un problema—dice el Lobo sin alzar la vista.

—¿Qué problema?—pregunto entusiasmado.

Un problema sería lo ideal para distraer a Valborg.

—La Loba Ancestral no aparece—dice el Lobo y yo salto de mi asiento.

—¿Cómo que no aparece?—pregunto agarrándolo del cuello y tirándolo contra la puerta.

—Alfa su padre llamo, dice que su hija no está por ningún lado, enviamos a un grupo de rastreadores a buscarla—dice él casi sin aire por mi agarre.

—¿Por qué han tardado tanto en notificarme? Debieron haberlo dicho por el enlace—gruño saliendo a toda velocidad de la casa.

Subo al auto y me dirijo a la casa de mi Luna.

—Alfa el otro Ancestral ha encontrado a la cachorra, la llevan al hospital central—dice Jack a través del enlace con la manada.

—Gracias Jack—respondo sencillamente.

Esto no estaría sucediendo si hubiera hecho caso a mi Lobo y hubiéramos anunciado que Thessa es nuestra Luna como Valborg y yo queríamos, pero a madre no se le ocurrió algo mejor que hacerlo en la fiesta de mi cumpleaños que será dentro de tres días.

—Espero que nuestra Luna se encuentre bien—dice Valborg entre preocupado y desesperado.

—Solo cinco minutos más y estaremos con ella—digo para intentar tranquilizar a mi Lobo.

Llegamos al hospital y soy recibido por el equipo de rastreadores que me miran con cara de “hicimos todo lo posible”, los ignoro y me encuentro con una doctora que me mira con descaro.

—Que se aleje, nosotros somos de nuestra Luna—dice Valborg ante la actitud de las Lobas.

—Alfa, la cachorra recibió heridas leves por la caída y lo único que tiene un nivel elevado de riesgo es una fractura múltiple en su pierna izquierda—dice la doctora que me acompaña a la habitación donde tienen a Thessa—ella ahora esta inconsciente y según nos ha dicho el otro Lobo Ancestral, ella no se regenerará a una velocidad normal, sino que lo hará “a una velocidad media”, así nos ha dicho el Lobo—dice ella con cara de no hay nada que podamos hacer por ella.

Ignoro a la doctora y al llegar a la habitación me encuentro con Russel que está al lado de la cama de Thessa y Dominic Wanderwor que está en un sillón en la esquina de la habitación.

—¿Russel que sucedió?—pregunto lo más calmado que puedo.

—Thessa salió a explorar el bosque y al parecer escalo una colina a varios kilómetros de la casa, se cayó y perdió el conocimiento, llame a tu casa por ayuda, pero lo único que recibí fueron llamadas en espera tras llamada en espera, al final llame a Dominic y el vino a ayudarme—dice el padre de mi compañera destinada tocando suavemente la mano de su hija.

—Unos pocos kilómetros no serían problemas para mis rastreadores—digo en voz baja, pero al parecer Dominic me escucho.

—Thessa y Dakota pueden esconder sus esencias hasta el punto de pasar a ser invisibles—dice el Lobo Ancestral con orgullo.

—¿Dakota?—pregunto desorientado.

—No me digas que no has conocido a Dak y así la quieres nombrar tu Luna—dice él en respuesta.

Miro a Dominic con cara de asesino, pero este solo se ríe de mí.

—Ella debería de estar conmigo—dice el Lobo Ancestral cuando se deja de reír.

—Ella es mía, se quedará a mi lado—respondo a punto de perder el control.

—Ninguno de los dos es dueño de mi hija—dice Russel poniéndose de pie.

—Vamos Russel no me digas que estás de acuerdo con que él sea el dueño de Thessa—dice Dominic al padre de mi Luna.

—Yo no puedo opinar sobre esto, Thessa ya ha tomado una decisión al respecto y yo la respetare—dice él en respuesta al Lobo Ancestral.

—Nuestra Luna ya nos ha elegido—dice Valborg feliz.

—Thessa es una Ancestral, no un objeto que tú puedas poseer—dice el Lobo que se acerca a mi Luna.

Olfatea cerca de ella y luego mira a Ángel.

—Ella está bien, debe descansar, el golpe en la cabeza la mantendrá dormida unas horas—dice el Lobo Ancestral luego de unos segundos.

—Gracias Dom, no sé qué hubiera hecho sin ti—dice el padre de mi Luna.

Thessa lleva todo un día inconsciente y Valborg se está desesperando por la cercanía que tiene Dominic con ella, los doctores de mi Manada no saben que le sucede, ya debería de haberse regenerado, pero no, ella está en coma con un derrame en su cabeza, Dominic dice que estará bien, pero los doctores dicen que sería mejor operar y tratarla como una humana, claro que Russel tiene la última palabra y él solo escucha a Dominic.

Hemos decidido que la fiesta de mi cumpleaños y la presentación de Thessa como mi Luna será la siguiente semana, así Thessa tendrá tiempo de curar su pierna y estar al cien por cien.

—¿Hemos?—pregunta Valborg con sarcasmo.

—Di una orden, ¿Contento?—respondo a mi Lobo.

Básicamente dije que la fiesta se pospondría y listo.

—Sé que estas despierta—dice Dominic para sacarme de mis pensamientos.

—Mmm—responde Thessa solamente.

—Si nuestra Luna despertó—dice Valborg feliz.

—Ten bebe un poco de agua—dice el Lobo Ancestral.

Le acerca el vaso a la boca a Thessa y en su intento de beber agua se termina mojando toda la bata.

—Ten cuidado—gruño a Dominic.

—No grites, Dakota tiene los oídos muy sensibles—dice él ante la reacción de Thessa.

—Lo siento mi luna—digo acercándome y dándole un beso suave en la frente.

—Fue una dura caída, estarás al menos una semana con un yeso—agrega Dominic luego.

—Me resbale—dice Thessa apenada.

—Somos lobos hermosa no cabras de montaña—dice Dominic bromeando con mi Luna.

Sus palabras hacen que gruña al Lobo Ancestral que tengo del otro lado de la cama.

—Ella es mía—digo con todo el autocontrol que tengo.

—Ella no es un objeto que te pueda pertenecer—dice Dominic tranquilamente.

Estoy a dos segundos de arrancarle la cabeza.

—Dom ¿En dónde está papá?—dice Thessa y me distrae de mi intento de asesinato.

—Su voz es la melodía más dulce—dice Valborg sin poder quitarle los ojos de encima a nuestra Luna.

—¿A pesar de que esta ronca por los dos días que lleva dormida?—digo a mi Lobo intentando bajar sus ánimos.

Pero fracaso, este tonto esta enceguecido por Thessa.

—Estuvo estos dos días aquí y al saber que Dak ya había recobrado la consciencia lo mande a casa hermosa—responde con una sonrisa de idiota el Lobo Ancestral.

Me sale un gruñido ante sus palabras que me dan ganas de dejar libre a Valborg.

—¿Dos días?—pregunta Thessa nuevamente.

—Nos tenías asustados mi Luna—digo con rapidez para sacarle toda su atención del Lobo Ancestral.

—Perdón—dice ella apenada—¿Hace cuánto estas aquí?—pregunto ella volviendo a prestarle atención al Lobo.

—Russel me llamo apenas desapareciste, los inútiles de esta manada no te podían hallar—dijo el Lobo mirándome a la cara—Dakota oculto tus esencias y estabas muy alejada de la casa, en territorios neutrales—continúo volviendo a mirar a mi Luna—te castigaría, pero con esa pierna rota creo que te bastara—concluyo el Lobo Ancestral guiñándole el ojo a mi Luna.

Se quedaron en silencio unos segundos hasta que Thes hablo nuevamente.

—Tengo hambre—dice ella y Dominic se carcajea haciéndola reír a ella también.

—¿Jack?—llamo al jefe de mi guardia.

—¿Si Alfa?—pregunta él al instante.

—Traigan pollo con ensalada mixta y frutas frescas para Thessa—digo con rapidez por el enlace de la Manada.

—No sé porque te tardaste tanto en decir eso—dice Dominic luego de terminar de reír.

—Listo Alfa—dice el Lobo luego de unos segundos.

—Enseguida te traerán comida mi Luna—digo al tener la confirmación de Jack.

—Toma—dice Dominic entregándole el celular a Thessa.

Llama a su papá y luego de unos minutos hablando con su padre se dispone a comer lo que Jack ha traído.

—Debes descansar hermosa—dice Dominic cuando termina de comer.

Thessa se mueve en la cama y veo como se acomoda para dormir, Dominic se mete con ella en la cama.

—¿Qué demonios crees que haces?—digo intentando controlar a Valborg que quiere arrancarle la cabeza en este instante.

—Uziel él es mi hermano, por favor así me curare más deprisa—dice Thessa, pero la ignoro.

Agarro del cuello a Dominic y lo lanzo fuera de la cama para empezar a darle golpes.

—Basta—grita mi Luna—quiero que te vayas ahora—dice seriamente.

—Nos está rechazando—dice Valborg sin poder creerlo.

—Tú eres mía—digo serio—no te voy a dejar sola con este Lobo—concluyo sin dejar de mirarla.

—Si lo harás, quiero descansar y no lo hare sabiendo que ustedes dos se mataran en cuanto tengan oportunidad, Dominic es mi hermano y tú eres mi Lobo—dice ella más tranquila y enfatizando las últimas palabras.

—Creo que podríamos dejarla sola con él—dice Valborg después de escuchar esas palabras.

—Descansa mi Luna—digo dándole un beso en la frente y pronunciando muy bien las palabras—que ni se te ocurra ponerle un dedo encima—declaro al Lobo que solo me mira.

Salgo de la habitación con tranquilidad, aunque al cerrar la puerta Valborg se empieza a desesperar por regresar con ella así que me retiro lo antes posible del lugar.

La Loba de Thessa es impresionante, blanca como la nieve, sus ojos brillan como la misma luna y lo que más me gusto es que Dominic se ha ido, eso de que se puede transportar no me impresiona, cuando le pregunte a Thessa si podía hacerlo también no me contesto, sino que se rio de una forma burlona.

—Besar a nuestra Luna ha sido lo más increíble que hemos hecho en nuestros quinientos años de vida—dice Valborg completamente enamorado.

Desde que la besamos no para de recordarlo una y otra vez, en mi mente solo está la sensación de sus labios, su respiración y como sus esencias inundaron todo mi maldito sistema.

—Ya basta Valborg—suplico a mi Lobo, aunque sé que es inútil.

—Sí, sí, si—grita Selena muy feliz.

Me acerco al salón donde está la cachorra con madre.

—Me estoy arrepintiendo de haberte dado permiso—dice madre a la cachorra.

—Si mañana a las tres—dice Selena a su celular.

—Está hablando con nuestra Luna—dice Valborg feliz.

—Adiós, nos vemos—dice ella y corta la llamada.

Selena se tira en el sillón nuevamente y continúa con la lectura de su libro.

—¿A dónde irán mañana?—pregunto sin mostrar mucho interés.

—Saldremos—responde ella sin prestarme mucha atención.

—Selena responde a tu tío—dice madre en mi defensa.

—Iremos con Thes al centro comercial—dice ella sacándome la lengua al final.

—Bien, yo las llevo—digo sabiendo las consecuencias de eso.

—Sí, que Jack vaya también así cargara mis paquetes—dice ella mirando al patio donde está el jefe de mi guardia.

—Esto nos saldrá muy caro—dice Valborg.

—Pero podremos ver a Thessa probarse ropa—digo a mi Lobo que inmediatamente se hace imágenes de ella modelando ropa para nosotros.

Llegamos a la casa y las cachorras se fueron a la habitación con los paquetes de Thessa.

—¿Majestad quiere una copa?—pregunta Russel cuando nos quedamos solos en el salón.

—Si por favor, algo fuerte y ya te dije que me digas Uziel—digo acomodándome en uno de los sillones.

Luego de unos minutos Russel regresa con una copa de whisky con hielo.

—Me gustaría pagar los gastos de Thessa—digo con tranquilidad.

—Los gastos de Thessa están completamente cubiertos—dice en respuesta el padre de mi compañera destinada.

—Como dije antes me hare cargo de ella—digo intentando no perder el control.

—Ella no necesita nada—dice Russel con tranquilidad.

—Ella es mía y por ende me ocupare de todo lo que necesite—digo intentando controlar a Valborg que se está desesperando por la negativa del padre.

—Mi hija no es un objeto que puedes poseer o no cuando te plazca—dice él elevando el tono de su voz.

—Thessa no es un objeto, ella es mía y desde ahora me hare cargo de todo lo que tenga que ver con ella—digo seriamente.

—Mi hija no necesita de ti—responde el padre de mi Luna.

Lanzo la copa de whisky a la mesa ratonera que está en medio de los sillones y esta se parte por el golpe.

—Nuestra Luna no se apartará de nuestro lado—declara Valborg furioso.

—Quiero que te vayas de mi casa ahora—grita Thessa entrando al salón y clavando su mirada en mí.

—Mi Luna no es lo que tú crees—digo volviendo a tener el control de mis acciones.

—Está muy enojada—dice Valborg.

—No lo volveremos a decir, fuera de nuestra casa—dice Dakota, la Loba de Thessa tomando el control de su cuerpo.

—Mi Luna—digo, pero Thessa me interrumpe bruscamente.

—¡No soy tú Luna y jamás lo seré, vete!—grita ella con más fuerza.

—Ella nos está rechazando—dice Valborg a punto de desplomarse.

—Tío deberíamos irnos—dice Selena llegando a la escena.

Asiento y nos dirigimos a la puerta, pienso dos veces sobre si continuar caminando o no, pero me decido por irme de ahí.

Conduzco a la casa en silencio y cuando llegamos Selena apoya una mano en mi hombro y me dice que le dé tiempo, asiento y la cachorra entra en la casa, bajo del auto y dejo que Valborg se transforme con libertad, pero el Lobo solo se queda ahí esperando un milagro.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo