Mitch abrió la puerta de la habitación del hotel permitiendo pasar primero a Derek.
-Espero que no te importe que le haya dejado el ático a Dave- dijo Mitch cerrando sus brazos alrededor de la cintura del joven desde atrás.
Derek negó con la cabeza al mismo tiempo que la giró hacia él.
-No-
Mitch llevo sus manos al botón de sus pantalones y lo desabrochó.
Acto seguido metió una mano a través de la prenda…
Y acarició su erección junto al aro.
-Mitch- jadeó Derek.
-No voy a quitarlo aún- musitó bombeando su pene.
Seguidamente, usando su otra mano, empezó a soltar los botones de la camisa.
Impaciente.
Desesperado por tocarle.
-Mitch, es…espera un momento, Mitch, Mitch espe…-
Tarde.
Los dedos del castaño