capitulo 4 recuerdo doloroso.

Sin encontrar otra salida decidí volver a mi manada, sus habitantes al verme me enfrentaron cómo aún enemigo solo se preguntaban entre sí.

¿Qué tipo de bestia es?

ꟷ Padre soy Albert — dije en el momento que lo vi llegar a mi lado con la intención de pelear conmigo.

—Albert como es que eres esto— eso fue lo único que le salió decirme.

ꟷ Si padre esta bestia es lo que soy ahora, esto fue lo que me pasó por desobediente— le dije bajando la cabeza con pesar.

Mi padre se acercó a mi dudoso y muy indeciso ꟷ no te preocupes hijo yo te ayudaré ꟷ me dijo él dándome consuelo y esperanza, pero el momento que intento abrazarme me di cuenta estando a mi lado se veía sumamente pequeño.

ꟷ Ven Albert— me llamó él  con tristeza.

Los días pasaron y mi padre había mandado a buscar a varios brujos y hechiceros de todo el mundo, los cuales al llegar negaban seguido me veían.

Hasta que una hada creo un anillo con el cual podía volver a mi estado humano solo con ese anillo puesto podía ser yo y no esa terrible bestia.

Le expliqué a mi padre y a el hada llamada Miranda sobre la maldición que me había impuesto la Valquiria. 

ꟷ esa valquiria te ha condenado a vivir sin amor y no podrás tener hijos a no ser que encuentres un ser puro y lleno de luz y  para tu mala suerte ni siquiera las hadas tenemos esas cualidades porque todo ser siempre tiene un lado oscuro—  en ese tiempo no me importaba tener hijos y mucho menos amor solo deseaba vivir ocultando aquella fea apariencia que tenía, pero con el pasar de los años sentí que la manada ya no era mi hogar y más al escuchar como el consejo de ancianos decían que una bestia como yo no podría ser su alfa supremo.

Desilusionado abandoné la manada y me fui a vivir como un humano normal bueno no tan normal porque me he convertido en el mafioso más temido el cual según los humanos tiene un pacto con el diablo porque las balas no me lastiman.

Soy una bestia insaciable me fascina ver a las personas sufrir, me he dedicado a usar a las mujeres humanas como mi desahogo personal, por eso he creado varios clubes sexuales para poder usarlas con libertad y a mi manera sin tener que enamorarla ni usar nada de esas cursilerías baratas que ellas exigen cuando son muy recatadas.

¡Los humanos con su romanticismo dan asco! Pensé antes de darle un corte perfecto a mi habano.

Mire el cortador que tenía en mi mano derecha y sonreí al recordarme como la anoche anterior le corté varios dedos de la mano a uno de los mafiosos italianos que se quiso pasar de listo conmigo.

—señor, aún no sabemos dónde se encuentra la hija del elfo de las estrellas— me dijo uno de mis sirvientes.

—pues búsquenla así tengan que bajar al mismo infierno, estoy cansado de escuchar la misma excusa llevo un maldito milenio esperando encontrarla — le reclamé cabreado, mostrándole el cortador de troquel para habanos y él al verlo me miró aterrado.

Si-sí, señor le diré a el hada Miranda que localice nuevamente al elfo para ver si encontramos su aura— me respondió mascullando mientras hacía varios ademanes él lo que realmente deseaba era tranquilizarme, sabía que no le podría ir muy bien si me llego a desesperar, pero ya sabía que no obtendrán resultados algunos.

 En realidad no sé cómo es que ese elfo ha logrado ocultar su poder.

Han pasado cinco mil años después de aquella maldición y al estar tanto tiempo solo sin el calor de una persona a quien pueda amar o quien me ame realmente como soy, en estos últimos mil años he estado deseando tener un hijo, sé que él me amará sin importarle que sea una bestia y solo ese elfo puede cumplir ese deseo que tanto anhelo. 

Hace 1000 años descubrí que existe un solo ser que podría cumplir mi único deseo y este era un elfo de luz, ese elfo es el elegido de las estrellas para reinar entre ellos siendo el único ser que podría eliminar cualquier oscuridad por más fuerte que fuera esta.

Después de obtener dicha información busqué una vidente la cual me dijo que el elegido de las estrellas aún no había nacido, pero que según sus visiones ella podía ver una predicción donde se veía que en 978 años más tarde nacería un elfo de luz en una aldea.

Contando los días esperé pacientemente hasta que supe cuál sería la aldea, pero para mi mala suerte los elfos estaban enterados de mis planes así que sacaron a la pequeña de la aldea llamada Álfheimr y después de ese día no supe más de ella.

Apenas hacen dos años encontré al elfo que había buscado, vivía entre los humanos en una pequeña cabaña a la orilla de la carretera de mistifoll.

★ bestia, no te llevarás a mi pequeña ★ me gritó el elfo mientras se ahogaba con su propia sangre.

★ la encontraré y usaré su luz para que tenga a mi hijo y después la mataré como te he matado a ti ★ le respondí sonriendo con malicia.

★ No, no ★ lloraba con la poca fuerza que le quedaba.

¡Estoy cansado de esperar a la futura madre de mi hijo! Pensé antes de sentir la presencia de una pequeña humana que al ver al elfo se acercó a ella mientras lloraba.

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