Pero tenía que ser fuerte, sabía que sus sentimientos por el seguían siendo los mismo, eso le decía su corazón. Porque ya no era una chiquita de aquel entonces, había crecido y conocido, quería la firmeza que el sentía lo mismo, que seguí siendo igual que hace dos años. Tenía que asegurase que su proposición no fue solo por decirla. Habia pensado mucho en este momento hasta en las cartas que ambos se mandaban constantemente, a pesar de la distancia cada una de las palabras que leía era tan fuerte que podía sentirse bien, que esta