Habían pasado dos semanas y mí padre ya estaba sintiéndose mejor en salud y en aspecto. Este había pasado tiempo hablando con Gabe, era su yerno favorito, hasta incluso lo llevaba a la empresa y ayudaba en algo.
—Creo que mí padre me va a quitar a mí marido— me quejó con Andrea que estaba haciendo botanas para los hombres de la casa, ya que estaban viendo un partido y ambos le iban al mismo equipo.—No se angustie, tiene toda una vida para vivir con su marido.— sonrió Andrea y salió a llevarle la botanas para luego regresar.—Me agrada de que, este se divierta ya que Gabe solo habla por teléfono con su padre. No me molesta compartir a mí padre, pero también quiero que me de atención y de otro tipo.—¡Señora!— exclamó Andrea y yo me reí.Escuche como la puerta de entrada se abría y fui a ver quién era, mí madre entra y saluda a los chicos pero ellos están entretenidos viendo el juego.—Hola cariño— me saluda mí mama.—¿Quién te hizo una llave?—pregunto.—Le di