Capítulo 127: Serás papá.
—Mi amor… es que… estoy embarazada.
Confesó Rosalind, que lo observaba con los labios temblorosos, los ojos brillantes, el pecho subiendo y bajando con una respiración que no lograba estabilizar.
Donovan no habló inmediatamente. La miró en silencio, como si la estuviera viendo por primera vez. Como si en ese instante comprendiera algo que siempre había estado ahí, esperando ser revelado.
Su mano se deslizó desde la mejilla de Rosalind hasta la nuca, sosteniéndola con suavidad. Ella sintió cómo sus músculos se relajaban de forma involuntaria.
Era como si su cuerpo hubiera estado aferrándose a una tensión invisible, a un miedo silencioso, y en el toque de Donovan, ese miedo comenzaba a deshacerse.
—Ven aquí —murmuró él, con voz baja.
La atrajo hacia su pecho. Rosalind cerró los ojos de inmediato. Se escondió contra él como si su cuerpo supiera exactamente que ese era su lugar seguro en el mundo.
Donovan bajó la cabeza y apoyó sus labios en la sien de ella, sin besar aún, solo re