Los hombres separaron a las mujeres y las sostuvieron con fuerza, aunque Ana Paula había llevado la peor parte. Su cabello, al igual que el de Amara, estaba alborotado y enredado, pero sus mejillas estaban rojas y a punto de volverse azules.―¡Vas a pagar por esto, perra! ―grito Ana Paula con la re
Paulina W
¡Perdon, perdón!
Ayer estuve full, pero les tengo una noticia. Mis hijas, salen finalmente de clases el miércoles. por lo que tendre más tiempo para dedicarme a mis historias.
Las amo, por cierto, Ja, ja, ja, me rei mucho escribiendo la pelea.