Sus labios se separan para ayudarla a respirar mejor y ese pequeño e insignificante gesto me prende, estoy loco por besarla, por quitarle la ropa y descubrir qué clase de sujetador lleva esta vez, con Jake hasta el tema de la ropa interior se me hace sensual y atractivo porque no sé qué voy a conseguir.
Me acerco mas a sus labios, decidido a probarlos una vez mas, a devorarlos como si mi vida dependiera de eso.
— ¿Qué haces Zero? — murmura sin apartarse a escasos centímetros de mi boca
— Te pedí que no pensaras ni preguntaras — murmuro sacando mi lengua y rosando su labio inferior con suavidad.
Sus ojos se cierran y la siento temblar ligeramente.
— Sino lo hago — no la dejo terminar, mis labios la buscan con desesperación y en cuestión de segundos mis lengua baila junto a la de ella seduciéndose mutuamente. Danzando de manera sincronizada como si llevaran la vida entera conociéndose.
Su lengua rosa la argolla de mi labio inferior y luego cierra sus dientes sobre ella y tira ligerament