Cap. 11 ¡No te daré a mi hijo!
“La valentía de una madre es el mejor motor que impulsa a un hijo cada mañana”
No se creía nada de eso de que quería saber sobre ellos y le dijo:
—Dime la verdad Zeink.
Entonces se la dijo:
—Dice que se parece a mi hermano fallecido.
Valkiria miró a su hijo que miraba todo con curiosidad y entonces le dijo a Zeink:
—Zeink no quiero problemas.
—Calma, no hay problema, porque Noah no es nada mío, ¿verdad?
Valkiria lo miró sorprendida, no podía creer que la llevara para eso, miró a su hijo y le dijo:
—Espero que no haya problemas, ni confusiones, Noah es lo más importante que tengo en mi vida.
Saíd se acercó en ese momento y vio al niño y fue a él y se acercó a mirarlo detenidamente, esos ojos… Esa sonrisa diáfana, ese era su nieto, su corazón se lo gritaba en ese momento:
—Dam dami.
Noah le preguntó entonces:
—¿Qué significa eso?
—Sangre de mi sangre.
Noah sonrió y le preguntó:
—¿Y eso qué quiere decir?
—Que me perteneces…—sonrió el anciano.
Valkiria entonces se puso de