Una semana después, Sofía había tenido una semana bastante agitada. Por un lado, estaba preparándose para la posible llegada de Teodoro a Los López en cualquier momento, y por otro lado, Lucía la visitaba constantemente.
Sofía estaba un poco frustrada. Lucía había dicho que venía a pelear por Julio, pero en lugar de buscar a Julio, ¿por qué la buscaba a ella? ¿No estaba tratando de hacer que Sofía se rindiera voluntariamente? ¿O acaso Lucía era tan ingenua?
Pero Lucía tenía sus propias razones para buscar a Sofía. No era que no quisiera ver a Julio, sino que Julio ni siquiera la recibía. No tenía la oportunidad de verlo, así que pensó que si estaba cerca de Sofía, tal vez podría encontrarse con Julio cuando él viniera a recogerla después del trabajo.
—Doctora López—, Lucía entró con una sonrisa y se sorprendió al encontrar a Julio en la consulta. Aunque intentó ocultar su sorpresa, no pudo evitar que su sonrisa se desvaneciera un poco—Julio, ¿también estás aquí?
Julio la miró de reojo