AMOR INESPERADO.
HISTORIA DE TADDEO FERRARI
—¡Camilla!, ¡Camilla! —gritó Taddeo
Ella se volteó, vio su rostro atravesado por el dolor y se sintió nuevamente culpable, él sólo alcanzó a decir —Discúlpame, por favor.
Cayó en el suelo, ella corrió hacía él para sostenerlo mientras le decía—No amor, lo