Capítulo 9: La fiesta
Luego de que las aguas se calmaron en la casa y la tensión bajó, Samantha recibió una llamada de su amiga Isabell, tenía rato que no conversaba con ella y sintió al instante extrañarla.
— Hola mi querida Sam, ¿cómo estás?
— ¡Isa! Muy bien ¿Tú cómo andas?
— Estoy bien, amiga, triste porque te fuiste tan repentino, pero entusiasmada porque quiero invitarte a un sitio que sé que te encantará – Le mencionó con alegría.
— ¿A dónde me quieres llevar? — Preguntó Samantha.
— Te llevaré a una fiesta, nos divertiremos, ya verás.
— No lo sé, Isabell, mi jefe últimamente ha estado de mal humor y no sé si me dé el permiso – Le contesta en tono de duda y persuasión.
— Por favor amiga, tenemos que vernos, quiero que vayamos juntas, no me dejes sola – Exclamó en tono de súplica.
— ¡Ok! Está bien, tú ganas, no te diré que no, pero solo por esta vez.
— ¡Sí! Nos vemos entonces – Le respondió con entusiasmo.
Samantha se dirigió a la sala a conversar con Gerald sobre la invitación de