Tatiana
Escucho el sonido de mi propia respiración, y los latidos de mi corazón que retumban en mis oídos. Mis manos me tiemblan mientras sujeto mi arma.
Desde que entré en Medianoche sentía que había una fuerza en mí, como si ingresara una nueva Tatiana, muy diferente a la que se fue.
El alfa