Capitulo 114: EPÍLOGO.
Siete años después.
Reino de Maita.
Esa hermosa mañana de verano, el Rey Lance caminaba por el jardín, esperando a su esposa que llegaría desde Gorian con el príncipe heredero de dicho Reino, Jhonn cuarto Wiztan.
— ¡Papi mida, ahí vene mi hemanito! — Exclamó Serenia Lamparth, la princesa de Maita, de solo cuatro años, que Lance cargaba en sus brazos.
— ¡La princesa más hermosa del mundo! — Exclamó Landel sonriente, alzando a Serenia quien abrazó a su querido medio hermano. — ¿Qué tal me veo? — Preguntó él al Rey. — A mi mamá le encanta que vista colores oscuros, dice que me sientan mejor~ ¡Estoy muy emocionado! — Sonreía el príncipe heredero de entonces doce años.
Lance se echó a reír en ese instante.
— Jajaja~ hace solo dos meses la viste, no actúes como si hubiera pasado una década~ — Molestaba él a su hijo.
Landel se ruborizó y frunció el ceño apenado delante de su padre.
— ¡Si, pero esta vez viene con mi hermanito! A él solo me dejan verlo una semana y únicamente cada veran