— Si de verdad te damos tanto asco, créeme que lo sabremos, nunca te obligaríamos a algo que realmente no quieres.
— Ya que tu boca mentirosa nos niega tanto, entonces probemos si tu cuerpo es más honesto.
— Eso que me pides, yo…
— Déjanos tocarte solo por cinco minutos, Rose, si no logramos hac