capitulo 30: Fuimos Amantes.
Lucca salió de la oficina de Abi completamente desconcertado. No podía creer cómo el tiempo había transformado a su exesposa. Estaba deslumbrante, con esos ojos verdes que lo dejaron sin aliento. Había recuperado su figura impresionante, que había ganado peso durante su matrimonio, y ahora lucía más radiante que nunca.
Subió a su auto y se dirigió al hotel donde se alojaba con Marco, su hijo. Al verlo, el niño corrió a abrazarlo y le dio un tierno beso en la mejilla.
—¡Hola, papá! ¡Te extrañé mucho! —dijo Marco. Lucca se maravillaba de cómo su vida había cambiado desde que el niño llegó a ella. El pequeño le trajo paz, alegría y, sobre todo, amor. Era un niño tan dulce que no merecía tener una madre como Juliet, quien siempre lo menospreció por su asma, una condición que, a pesar de estar controlada, ella consideraba una carga. No le importó abandonarlo cuando se fue con su amante.
—Hola, mi amor. ¿Cómo estás? —le preguntó con ternura.
—Muy bien, papá. Estuve jugando a los videojue