Lo que sentía cada vez que tenia a Fran cerca, me recordaba a la sensación en mí, cada vez que en mi adolescencia trepaba por la ventana de mi cuarto para poder escaparme a alguna fiesta clandestina. Ese estremecimiento de libertad peligrosa, un movimiento en falso y podía terminar desnucada en el suelo o aun peor castigada por mis padres.
Tome mis cosas rápidamente y le grite a Matthew:
- Mat me tengo que ir a buscar unas cosas ¿Nos vemos en la noche?
Esperaba que me respondiera con un simple si linda, pero salió de su oficina y me beso. Estaba demasiado romántico, demasiado pendiente en mí. Una pequeña y lejana voz en mi interior me decía ¿estás segura que es sincero? Sería demasiado irónico que ninguno de los dos lo seamos, aunque por lo menos mis sentimientos respecto a