CAPÍTULO 26: UN TRATO PARA MANTENER LA MENTIRA
Anthony Salvatore nunca ha sido un hombre que retroceda ante un desafío. Su familia siempre lo ha considerado el sucesor natural para liderar la mafia Salvatore, pero ahora, en esa habitación privada del hotel, siente que el peso de ese futuro amenaza con aplastarlo. Su negativa a casarse con Alice Bianchi, la alianza que garantizaría la expansión de los Salvatore ha puesto en jaque la confianza de su abuelo.
Lorenzo lo guía hasta la puerta, y Anthony entra sin vacilar, aunque por dentro su pecho arde de tensión. El Nonno está sentado en un sillón, con dos de sus hombres apostados a su lado. No necesita más para imponer respeto; su mirada gélida y su reputación son más letales que cualquier arma.
El Nonno sonríe de manera ladeada al verlo, una sonrisa que a cualquiera le helaría la sangre.
—Debo decir, muchacho, que tienes agallas. Ya me lo habías demostrado antes, pero esta vez... esta vez es diferente.
Anthony mantiene la compostura, pe