Capítulo 1278
Pedro hizo un gesto con la mano, indicando a todos que se retiraran, dejando espacio suficiente.

—¡Sujétenla! —Pedro señaló al jefe de los guardaespaldas que sostuviera a Leire, luego extendió los dedos, abrió su boca y tiró de su lengua hacia afuera. Inmediatamente, canalizó su energía interna y de repente le dio una palmada en la espalda a Leire.

Leire emitió un gruñido sordo, inmediatamente después su cuerpo se estremeció violentamente, su cabeza se inclinó hacia atrás y vomitó una gran cantidad de agua. Todos miraron con asombro al darse cuenta de que entre el vómito había un pez.

—¡Dios mío! ¿Cómo puede haber un pez en la boca de la señorita Leire?

—¿Será que este pez obstruyó su garganta y por eso no podía respirar?

—¡No es de extrañar que el método de Ovidio no funcionara, todo fue culpa del pez, qué mala suerte!

Mirando el pez en el suelo, los presentes se sorprendieron y comenzaron a murmurar. Finalmente habían encontrado la causa de la asfixia de la señorita Leire.

—¿C
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP