Ella solo deseaba vengar la muerte de su hermano y atrapar a su asesino, pero no imagino lo seductor que podría ser Kirill Volkov. Kirill Volkov el líder de la Bratva, es temido en toda Rusia por ser despiadado y cruel, se vera impactado ante la belleza de Hope, haciéndola digna para llevar en su vientre a su heredero, sin imaginar el gran secreto que ella oculta. Registrada en Safe Creative bajo el código 2303303912154 c/f 30/03/2023
Ler maisKirill Volkov. –
Nunca me había pesado tanto quitarle la vida a una persona como ahora, soy el líder de la Bratva, jamás me ha temblado el pulso por hacerle pagar a alguien con su vida su traición no sin antes hacerlo pasar por infierno. Pero hoy, así como el día, mi vida se muestra gris al tener que sacrificar al amor de mi vida, la única mujer de la que verdaderamente me he enamorado; si algo no perdono en esta vida es la traición y más si es una persona que me ha tenido rendido a sus pies, limpio cada una de las lágrimas que van cayendo lentamente por mis mejillas, no soy un tipo débil nunca lo he sido y no lo seré ahora cuando mi organización pende de un hilo no voy a perder lo que con tanto esfuerzo mis ancestros, mi abuelo y mi padre construyeron, así no sea la vida que yo haya querido simplemente no voy a caer.— Señor, disculpe, ya está lista –Sé que mi mirada en este momento no es solo la de un hombre herido, es sombría llena de oscuridad tanto que ninguno de mis empleados puede mirarme fijamente, a cualquiera lo hago temblar con solo una mirada, como lo hace mi sirviente ahora.
— En dos minutos bajo –Tenía que hacerlo, Hope me irrespetó, se burló de mí y me usó ella tiene que pagar, nadie se burla de Kirill Volkov, la amaba… la amo, pero también la odio y su muerte le hará saber no solo a la competencia, también a los federales que el que me las hace me las paga.
(…)
Entro a la celda donde tengo recluida a Hope, hace unos días era la mujer más hermosa que vieron mis ojos, con una fortaleza y un temple que la hacían ver aún más atractiva, ella era la excepción de la regla, le gustaba retarme no dudaba en mirarme fijamente a los ojos era la única a la que mis tatuajes, mi carácter, mi mirada no la hacían temblar de miedo, pero solo era porque detrás de su máscara se ocultaba el odio y el desprecio que sentía y la intención absoluta de acabar conmigo. De ella no queda nada, la veo tirada encadenada de manos y pies, toda sucia, delgada, la he torturado al saber de su traición.
— Ha llegado la hora –La miro con profundo dolor, pero eso desaparece al encontrarse con mi mirada, aun su posición sabiendo que va a morir, su mirada es retadora sin un ápice de debilidad aun cuando sé perfectamente que, aunque le quitara las cadenas su cuerpo no podría dar ni un solo paso.
— ¡Hazlo de una vez! Acaba con este fastidio –Su voz cansada apenas si escuchaba, pero salió sin un solo rastro de miedo, una lágrima solitaria escapó de uno de sus bellos ojos, noté que se odiaba por mostrar algo de vulnerabilidad, porque ella no lo era aun en esta situación.
— Lástima que esa lagrima no puede llegar a convencerme, al menos tuviste la dicha de estar con un verdadero hombre, pero tenías que preferirlo a él –Con la poca fuerza que tenía intento negarlo, lo que lleno mi cuerpo de ira ¿Cómo podría atreverse de nuevo a negarlo? Seguía siendo una descarada, simplemente no lo dudé cuando la imagen de ella con aquel imbécil apareció de nuevo en mi mente, saque mi arma y disparé dos veces el estruendo se hizo eco en todo el lugar, no quise observar su cuerpo y salí de la celda – ¡Llévensela y lancen su cuerpo en la puerta de la embajada, Ahora!
Desde este momento ya no quedó ni un poco de humanidad en mi ser, vuelvo a ser el mismo demonio o peor que fui antes de conocerte Hope Nolan.
Hope.-
Solo cierro los ojos al fin esta tortura acabara, mi cuerpo se estremece al sentir el primer impacto caliente como un tizón desgarrando la piel de mi esternón, el segundo impacto casi ni lo sentí fue como si algo entrara y saliera de mi cuerpo aun la sensación de la primera bala me estremecía cada fibra, mi vida con Kirill comienza aparecer con imágenes que poco a poco se van desvaneciendo, mis paspados ya no tienen la fuerza para mantenerse abiertos, ya mi cuerpo esta entumecido y el cansancio de la lucha hace estragos donde empiezo a ceder dejándome ir. Abro mis ojos respiro con dificultad, escucho las olas del mar siento en mis manos la arena húmeda y suave poco a poco me voy incorporando aturdida.
— ¿Una playa? –Observo a mí alrededor y mi vestimenta un delicado vestido blanco, pero me encuentro descalza.
— ¡Hola pequeña! –Giro rápidamente al reconocer la voz de mi hermano.
— ¿Henry? ¿Pero qué? Hace unos momentos estaba… –Él me sonreía, observe su traje blanco, se veía diferente con una expresión tranquila en sus ojos color verde, desvié la mirada hacia la playa y solo estábamos los dos, el único sonido que se escuchaba era el mar romper en la orilla recordé comencé a buscar las heridas de bala no había sangre, no había dolor y entonces lo comprendí. –Estoy muerta. –Mi hermano bajo la mirada con tristeza.
— Desde hace mucho que te he estado esperando, voy a ayudarte en este proceso, sé que no es fácil de asimilar y es muy confuso, viviste lo mejor y lo peor de la vida –Lo mire desconcertada, angustiada.
— Yo no quería morir Henry yo… yo –Hundí mi rostro entre mis manos dejándome caer.
— Hope, al principio no queremos estar muertos créeme, pase por lo mismo que tú solo date la oportunidad de sentir paz
— ¿Cómo voy a sentir paz? ¡Si él no me creyó, si yo no quería morir!
— Ya estabas muerta en vida Hope, este proceso te permitirá sanar todo lo malo que hiciste, los rencores, las mentiras, también todo lo que te hirió, en este proceso tu ego dejara de existir te volverás un alma pura dejando tu viejo yo… tuve que pasar por lo mismo, pero me di la oportunidad de perdonar todos los errores que cometí en esa vida.
— ¡PUES YO NO QUIERO! ¡QUIERO VOLVER! –En otra vida Henry no habría permitido que le levantara la voz, pero estaba solo mirándome tan sereno, sin expresión alguna. –Acepté estar con él para vengarte, pero mi vida se fue en ello ¡DEJAME VOLVER!
— Hope yo nunca te pedí que vengaras mi muerte, entenderás que eso aquí ya no tienen importancia, aquí te darás la oportunidad de perdonarte Hope –Negué agitadamente mi cabeza, mientras me apartaba de él, pronto mis pies se movieron por inercia y comencé a correr a lo largo de esa inmensa playa que parecía no tener fin, me sentía enojada, ¿Cómo podía decirme que no me pidió venganza? ¿Cómo pretende castigarme con eso? Si me hice agente precisamente para vengar su muerte inhalo profundamente observo la playa se ve exactamente igual en todas partes, tan solitaria, serena y hermosa cierro los ojos dejo que mis pulmones se llenen del aroma del mar, extrañamente comienzo a tranquilizarme… pero sigo sin aceptar que ahora he perdido mi vida y no hice nada… ¡Sí! Si hice algo me enamoré del hombre que destruyó a mi familia, como puedo olvidar que aún lo amo, comienzo a recordar cuando todo este desastre comenzó.
Kirill.-Los idiotas del FBI según mi gente ya no están en Moscú, pero tengo que tomar medidas ya lograron infiltrarse una vez hasta llegar a mí, solo que no esperaban ser traicionados. Hope y yo podríamos volver a la mansión, tengo en mi mano el sedante quiero confiar en ella, sin embargo no fiarme del todo, no puedo permitir que sepa la ubicación exacta de este bunker, por lo menos hasta que sea mi esposa por completo, una vez que quede embarazada volverá aquí.Seguramente me va a odiar, pero debo protegerla y ahora comienzo a entender porque mi padre nos envió a mi madre y a mi lejos, solo pensar que a Hope le pudiera pasar algo me pone los pelos de punta y simplemente no puedo permitirlo, aunque ella no es mi madre, es una guerrera si le enseño a defenderse mantendría a salvo a nuestro heredero. (…)Un grito desgarrador me sobresalto despertándome, me había quedado dormido sobre el escritorio, salí corriendo al escuchar otro grito era Hope, entré en la habitación ella se retorcía
Hope.-Las últimas conversaciones con Kirill fueron bastante intensas y en cierto modo, realistas nos esforzamos por tener una vida normal ignorando que existen cosas que nos sobrepasan. ¿Qué será lo que contiene ese nano chip? ¿Será algo tan peligroso como para que Henry haya faltado a su juramento? — ¡Dios que confusión! Tantos secretos.Y yo sigo sin avanzar en lo el objetivo que me tracé, pero estar aquí encerrada junto a él siento como el odio disminuye, mientras que el deseo por saber más sobre su mundo y sobre él aumentan dominándome por completo. Camino con tratando de poner mis pensamientos en orden por el pasillo del bunker llegué aquí con un plan que fue desbaratado por completo por la imponencia seductora de Kirill ¿Estaré loca? Una agente sintiendo atracción por un mafioso con el que tiene una deuda pendiente por saldar es una locura, pero no imposible. Un chapoteo captó mi atención al final del pasillo giré y fui dejándome llevar por el sonido del agua, no me sorpren
Hope.- Cerré el libro que estaba leyendo de golpe vi la portada el nombre “Un Secreto En La Niebla” hice una mueca. — Secretos –Susurré para mí misma, desde que Kirill y yo tuvimos esa conversación toda mi mente está hecha un huevo revuelto, las dudas sobre Henry traicionando al FBI, Volkov insinuando los secretos de la agencia todo me daba dolor de cabeza y ese nano chip ¿Por qué Jacob o la agente García no me dirían nada? Si eso es lo que buscan, negué estoy divagando Kirill es el malo aquí ¿Por qué tendría que creerle?Me tumbé en la cama sin poder dormir, ni siquiera me he dado un baño. Arrastré mis pies hacía el lujoso baño vi la tina enorme haciéndome guiños, si definitivamente tomaría un baño de tina. (…) Salí un poco más “relajada” si es que estar encerrada en una especie de bunker de máxima seguridad con un el líder la organización criminal más temible del mundo ¿Se puede estar relajada? Laika se acerca meneando su cola, estaba pérdida en mis pensamientos peinando mi ca
Jacob.-Tuvimos que huir de Sérguiyev Posad, una vez más Volkov nos descubrió obligándonos a separarnos y huir de Rusia, sin tener contacto con Hope, solo espero que ese miserable no la haya asesinado. — Volkov y la agente Bennett desaparecieron, los hombres de Kirill están desplegados por toda la ciudad buscándonos, debemos irnos –García insiste detrás de mí. — No podemos irnos y dejarla con él — No creo que la haya descubierto, de haberlo hecho habría empalado su cabeza y colocado en el centro de la ciudad, creo que la agente Bennett logró el cometido –Tensé mi cuerpo al escuchar esas palabras. — ¿Crees que se está acostando con él ya? –Las palabras salieron de mi boca con odio. — Era su misión y si quiere seguir viva, por cierto tu abuelo no deja de llamar, pide resultados. — Déjame solo –De solo pensar que Volkov la toca… quisiera destrozar esta maldita ciudad y dejarla en cenizas. – ¡Maldito seas Henry! Si no nos hubieras traicionado, no estaría pasando nada de esto, tengo
Hope.- — ¿Y qué es lo que tienes que al FBI le interesa tanto? –Pregunté intentando ocultar el torbellino de emociones que se acumulaban en mi interior, desde el desconcierto hasta la rabia, pero delante de Volkov debía simular. — No confío lo suficiente en ti para decirte –Laika lo veía a él y luego a mi le había prohibido acercarse. — Entonces tampoco me dirás ¿Qué es este lugar? –Me miro en silencio y con seriedad absoluta, en ese momento la voz de una mujer me hizo pegar un brinco. — Amo –La mujer tenía mis rasgos cabello negro aunque el suyo era rizado, ojos verdes y su piel era más clara que la mía, me sorprendió ver la total sumisión con la que se comunicaba con él. –Estoy lista –Le informó tenía la cabeza agacha con la mirada en el suelo y las manos hacia adelante una encima de la otra. — Te dije que no salieras de tu habitación –Le respondió él poniéndose de pie, su mascota intentó seguirlo pero él con una seña la detuvo. Entendí había traído a una amante, la ira se fue
Hope.- Me sobresalto al despertar de esa terrible pesadilla una vez más, mis parpados se sienten un poco débiles, la luz incandescente hace que me duelan, el olor a nuevo y el frío invaden todo mi cuerpo, mi mente comenzó a recordar lo último que vivió, olvidando de momento aquel sueño recurrente, ¡Kirill inmovilizándome! abrí los ojos despertándome de inmediato, por inercia coloque la mano sobre mi cuello sisee del dolor tenía una pequeña protuberancia.Mi vista recorrió el lugar, una habitación muy lujosa, todo se veía nuevo, con mucha iluminación tanta que parece un hospital, las paredes tenían un color marfil, me baje de la cama deteniéndome en la puerta giré mi mirada en las tres maletas grandes de color gris, ninguna es míaGiré la perilla y me sorprendió notar que estaba abierta salí con cautela, no podía evitar que moría de miedo, estaba sola sin un arma junto a un mafioso al que no le temblaba el pulso quitarle la vida a alguien. — ¡Si, sería muy tonta si no tuviera miedo!
Último capítulo