Estamos en una reunión con algunos de los proveedores de insumos, entre ellos Gabriel Manterola. Luca no se mira bien, lo que me preocupa totalmente, estamos a dos semanas del lanzamiento y lo necesito a mi lado, ya que si enferma… estoy perdida.
Al terminar, Gabriel se acerca para abrazarme y saludar a sus sobrinos, mira a Luca y sonríe. -Me parece que alguien debe ir a descansar. Te puedo recomendar a una chica masajista, es excelente, te quita hasta el resfrío con sus masajes. Podrías ir con tu novia – le guiña un ojo, pero Luca no reacciona como esperamos-.Se para repentinamente y corre hasta su oficina, vamos detrás de él muy preocupados. Menos mal que la reunión ha sido en la sala al lado de su oficina. -Hermano, ¿estás bien? – llamo a la puerta del baño -. Luca... – nada -. Fratello, rispondi o faccio sbattere la porta (Hermano, responde o hago que tiren la puerta).De pronto una voz femenina a mi lado es más tajante.-Abre esa puerta ahor