Estas palabras tomaron por sorpresa a Selene, miró con extrañeza al anciano que caminaba con la cabeza gacha.

Pero Emmett fue el primero que habló,—Cariño ¡ espérame un momento por favor!,— le susurró Emmett, para luego salir detrás de su abuelo.

Aitor se metió dentro de su estudio…el olor a polvo rápidamente bolo por toda la habitación. La última vez que había entrado a ese lugar, fue ese día que Harry murió, miró con culpa el retrato que tenía en la pared.

Aitor se sentó a observar la foto,—¿Porque querías que cuidara de tu nieta?….al final sigue siendo la hija de Alejandro, ¡ Que tan malo puede ser un padre con su propia hija, Harry!…¡Dime que es lo que tanto te preocupaba!— le interrogó él a la foto.

No pudo evitar que unas lágrimas rodaran por sus mejillas, pero así como salieron de rápido, así mismo las limpio.

Emmett quien cruzaba por el pasillo, logró ver a su abuelo en el estudio, realmente dudaba en cruzar esa puerta, incluso a esa distancia podía sentir la tristeza que em