"Está rancio", dice y se dirige a la puerta. Antes de llegar a ella, inspira profundamente. "Pero tú no", dice mirando a Blue, quien saca nuevamente su arma para disparar, pero esta vez el dardo es atajado en el aire y en un segundo ella es atrapada por Jeanet. Estefan y yo corremos a detenerla, pero nos lanza con mucha facilidad.
"Comida", repite una y otra vez. Volvemos a intentarlo y nuevamente Estefan es lanzado como balón y esta vez lleva el dardo. Llega al suelo inconsciente, y Blue está siendo sostenida por una mano y yo por la otra.
"Déjame comer en paz, vieja pervertida", me susurra y veo sus ojos, sus hermosos ojos tan cerca.
"Suelta". Al solo escuchar esa palabra, ella nos deja caer. Giro mi cabeza y allí está ella, Cassandra Voss, con sus ojos negros y un temple firme y frio.
"Tengo hambre", le reclama Jeanet. Cassandra recoge una bolsa de sangre y se la lanza.
"Cómete eso y deja d